La Dama de Blanco destacó que el sujeto que intentó abusar de ella sigue en la calle por tanto considera que las autoridades policiales no tiene intención de darle curso a la denuncia que formuló porque han pasado veinticuatro horas y "sigue en la calle," dijo. “Él ha manifestado que le tiene odio a los opositores", apuntó.
La activista de derechos humanos Vivian Peña Hernández, que participaba en una protesta cívica en la localidad de Palma Soriano para exigir la libertad del disidente encarcelado José Daniel Ferrer, recibió una llamada telefónica donde le aseguraban que su hija estaba enferma.
Peña Hernández residente es ese municipio santiaguero decidió abandonar la protesta y regresar a su casa pero se encontró que su hija no estaba enferma y además que un vecino a quien conoce por el seudónimo de Nani se le “coló" en la casa y se quitó la ropa frente a ella y a su hija menor”, apuntó.
“Fui para la policía a acusarlo y me dicen que a él no le podían hacer nada porque estaba loco,” aseguró la Dama de Blanco.
La Dama de Blanco destacó que el sujeto que intentó abusar de ella sigue en la calle por tanto considera que las autoridades policiales no tiene intención de darle curso a la denuncia que formuló porque han pasado veinticuatro horas y "sigue en la calle," dijo.
“Él ha manifestado que le tiene odio a los opositores", apuntó.
Por su parte la opositora Tania Montoya que también participaba en la protesta cívica junto a Vivian Peña explicó: “Vivian estaba aquí (en la casa de Tania) llevaba más de cuatro días y recibió una llamada telefónica en la que le expresaban que su hija se había puesto muy mal y se fue para allá y después supimos que la niña no tenía nada”, agregó.
Opositores de la localidad que participaban en la protesta creen que la llamada anónima por una parte, y la acción irrespetuosa del ciudadano contra la Dama de Blanco, obedecen a la intención de las autoridades policiales de amedrentar a los activistas para que abandonen las acciones de desobediencia civil.
