Denuncian ante la OEA situación de menores presos por el 11J en Cuba

Salomé García Bacallao, Claudia Genlui y Anamely Ramos, junto al secretario general de la OEA, Luis Almagro. (Foto: Twitter)

Las activistas Anamely Ramos, Claudia Genlui y Salomé García Bacallao, junto a una delegación de Freedom House, denunciaron este lunes la encarcelación en Cuba de manifestantes del 11J menores de edad en una reunión con el Secretario General de Organización de los Estados Americanos (OEA).

"Hoy recibí a delegación de @FreedomHouseLAC, @AnamelyRamos, @CGenlui_Hidalgo y @onceagainsalome para dialogar sobre la grave y preocupante situación de los presos políticos menores de edad en #Cuba y la violación sistemática de DDHH por parte del régimen", escribió Almagro en Twitter junto a fotos del encuentro.

Ramos, por su parte, agradeció el apoyo de la organización defensora de los derechos humanos.

"Muy agradecida de este equipo maravilloso de Freedom House que nos ha acompañado en los últimos días a denunciar lo que pasa en Cuba. Queremos vivos y libres a nuestros presos. Queremos una Cuba de donde no haya que huir. A la cual podamos volver", afirmó la profesora de arte y activista en Twitter.


El Comité de los Derechos del Niño de la Organización de Naciones Unidas atenderá la situación de Cuba como parte de su próxima sesión, a celebrarse en Ginebra, Suiza. Los debates sobre la isla, programados para el 11 y 12 de mayo, incluirán el caso de los menores presos por manifestarse el 11 de julio de 2021.

En abril, la organización Prisoners Defenders envió al comité la investigación titulada “Violaciones sistémicas a los derechos del niño en Cuba”, que destaca los perfiles de los menores de edad procesados por los tribunales, después del estallido popular. Según el informe, 36 niños y niñas fueron procesados penalmente en la isla por motivos de conciencia, lo que viola la Convención de los Derechos del Niño de la ONU.

En marzo pasado, el Tribunal Provincial de la Habana aumentó los años de prisión en la sentencia firme contra seis menores de edad que habían sido juzgados en febrero por su participación en las protestas populares el 11 de julio. "Es un acto de venganza, no de justicia", dijeron familiares a Radio Televisión Martí.