La Fiscalía colombiana confirmó el miércoles, como habían adelantado medios locales, que un ciudadano cubano fue detenido en la ciudad colombiana de Pereira (centro), donde preparaba un atentado islamista en Bogotá contra estadounidenses.
El detenido, identificado como Raúl Gutiérrez Sánchez, de 46 años, se comunicaba con grupos extremistas islámicos y había entrado en Colombia de forma ilegal con el objetivo de atentar en la "Zona Rosa" de Bogotá, un área de bares y restaurantes muy frecuentada por extranjeros.
Según el registro de las autoridades, Gutiérrez había sido deportado en el 2015 y expulsado del país en el 2017, oportunidades en las que también había ingresado de forma ilegal.
La Fiscalía le imputó a Gutiérrez los delitos de concierto para delinquir y terrorismo, que no aceptó.
El atentado estaba pensado para este martes, por lo que las autoridades adelantaron el operativo de detención.
La investigación determinó que el detenido, que comenzó a ser seguido por las autoridades tras ser alertadas por agencias de seguridad extranjeras, se comunicaba por la aplicación de mensajería Telegram con grupos extremistas islámicos y su objetivo "era dar muerte a ciudadanos norteamericanos para dar fuerza a grupos extremistas religiosos".
En las pruebas recopiladas por los investigadores se evidencia que Raúl Gutiérrez "sostiene conversaciones frecuentes con esas personas y relaciona temas de la ejecución de una acción terrorista".
Al finalizar la audiencia, el capturado dijo a periodistas sobre la acusación: "Lo vamos a discutir".
En varias conversaciones intervenidas el 2 de marzo pasado, el detenido habló con alguien fuera de Colombia, al parecer un ciudadano marroquí que vive en España.
"Alá te recibirá en el paraíso con sus brazos abiertos. Hazlo en nombre de ISIS. Mira al hermano de Estados Unidos en Nueva York que atropelló a los infieles. Lo hizo sin ayuda de la organización. Los hermanos en Inglaterra que acuchillaron y atropellaron no lo hicieron con la ayuda del ISIS, pero sí en su nombre. Solo te pido que lo hagas en nombre de ISIS", le manifestó el marroquí al cubano.
En el diálogo, Raúl Gutiérrez Sánchez le indica a su interlocutor que ya estaba "haciendo seguimientos a personal de la Embajada (de Estados Unidos en Colombia) y a políticos nacionales".
Igualmente le dieron instrucciones sobre cómo confeccionar la bomba: "necesitas dinero y saber dónde conseguir los materiales conseguí una olla grande que quepa en una mochila de uso deportivo, los materiales son..., y Raul le responde "ok: mochila, pólvora, tornillos y tuercas”.
Según la exposición de la Fiscalía, Gutiérrez Sánchez debía llenar la olla con las tuercas y pegarlas por fuera, debía además rellenarla con pólvora y el detonador debía ser de más de 20 centímetros de largo, a fin de que le diera diez segundos para escapar del lugar.
“Puedes conseguir la pólvora, puedes conseguir los materiales que la componen que es nitrato de potasio, azufre y carbono; para componer la pólvora tienes que mezclar todos los materiales en cantidades iguales y tienes que saber la magnitud de la olla”, leyó la Fiscalía del relato de Amir Maquin.
Para mañana se tiene previsto que el juez decida si envía a la cárcel al capturado, quien fue expulsado de Colombia en 2017 por haber ingresado de forma irregular.
En el siguiente podcast de El Tiempo, Jhon Torres, el editor de temas de Justicia del diario, primero en publicar la información, señala que la alerta les llegó a las autoridades colombianas de parte "de agencias norteamericanas que combaten el terrorismo islámico".
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Jhon Torres de El Tiempo sobre presunto terrorista cubano
[Agencia EFE, El Tiempo y El Colombiano]