Diaz-Balart: Una cosa es el pueblo cubano y otra el régimen que lo oprime

El representante federal por el distrito 25 de Florida Mario Diaz-Balart.

El congresista explica a los lectores de Martí Noticias cómo se libra la batalla política en relación con Cuba en el Congreso de EEUU.

El congresista republicano de origen cubano Mario Diaz-Balart habló en exclusiva con Martí Noticias sobre el Proyecto de Ley de Asignaciones para el Departamento de Estado y Operaciones Extranjeras para el Año Fiscal 2016, que cuenta con disposiciones presupuestarias dirigidas a impedir que se cumplan algunos de los puntos de las anunciadas relaciones entre la Casa Blanca y el general Raúl Castro.

Diaz-Balart cumple actualmente su séptimo mandato en la Cámara de Representantes y es, además, presidente de la subcomisión de Transporte y Vivienda de la Comisión de Asignaciones.

Perteneciente a una familia de larga tradición política en la historia de la Cuba republicana, anterior a 1959, Diaz-Balart fue elegido para la Cámara de Representantes en 2002 para representar el distrito 25 de la Florida y, a los 31 años, se convirtió en la persona más joven en ser electa para el Senado estatal de la Florida.

Estas fueron sus respuestas a Martí Noticias para informar a nuestros lectores sobre la batalla que ahora mismo se libra en el Congreso en relación con Cuba.

AA: Cuba es el único país sancionado aún bajo el acta Trading With The Enemy de 1917, TWEA (acta del comercio con el enemigo en español), basándose en la cual parece que el presidente Kennedy estableció el embargo en 1961. ¿La eliminación de Cuba de la lista de Estados patrocinadores del terrorismo permitiría al presidente Barack Obama suspender el TWEA? De ser así. ¿Tiene algún peso el TWEA luego de la codificación del embargo por obra de su hermano Lincoln Diaz-Balart bajo la Ley Helms-Burton?

MDB: La mayoría de las sanciones relativas a Cuba ya están codificadas en la Ley Libertad de 1996 y permanecen sin cambios. La decisión del presidente Obama de eliminar al régimen cubano de la lista de los Estados patrocinadores del terrorismo es injustificada y una concesión vergonzosa al régimen de Castro. Pero determina poco para cambiar las sanciones que el Congreso puso al régimen.

El presidente Obama no puede levantar unilateralmente las sanciones y el Congreso ha demostrado que no apoya su levantamiento. Como la ley estadounidense afirma expresamente, las sanciones no se pueden levantar hasta que en Cuba haya elecciones libres y multipartidistas, mientras no se legalicen los partidos políticos, la prensa y los sindicatos independientes y, por supuesto, mientras no sean liberados todos los presos políticos.

AA: El Proyecto de Ley de Asignaciones para el Departamento de Estado y Operaciones Exteriores para el Año Fiscal 2016 propone restringir los fondos para facilitar la apertura de una embajada; impedir que el Ejército y el aparato de inteligencia y el Partido Comunista reciban visas estadounidenses; y busca incrementar la ayuda para la democracia y las trasmisiones internacionales a la isla. Este proyecto que debe ser aprobado en la Cámara y luego en el Senado y que aún podría ser vetado en su revisión final si no cuenta con el respaldo de dos tercios o más del Congreso ¿cuenta ya con ese respaldo o con la probabilidad de alcanzarlo?

MDB: Las medidas que prohíben exportaciones a los militares cubanos, y que prohíben traficar en propiedades confiscadas, contaron con un apoyo abrumador en el Congreso de Estados Unidos. Enmiendas que intentaban parar esas medidas en el proyecto de ley de presupuesto para los Departamentos de Comercio, Justicia, Ciencia, Transporte, y el de Vivienda y Desarrollo Urbano, fracasaron con amplios márgenes de votos en el pleno de la Cámara.

El presidente Obama ha amenazado con vetar los proyectos de ley del presupuesto por varias razones, incluyendo las cláusulas sobre Cuba. Sin embargo, estas estipulaciones se encuentran en distintos proyectos de ley que asignan recursos a todas las agencias del Gobierno de Estados Unidos. Está por ver si el Presidente cerraría o no el Gobierno por estas cláusulas, pero lo que está claro es que el Congreso de Estados Unidos ha emitido dos sólidos reproches a la política de concesiones unilaterales del presidente Obama hacia los Castro.

AA: Una de las cláusulas del Proyecto de Ley para el Departamento de Estado prevé que ninguno de los fondos disponibles bajo el título de Operaciones Internacionales de Radiodifusión puede ser usado para establecer una organización privada sin fines de lucro, para la realización de cualquiera, y todos, los programas de radiodifusión para América Latina y el Caribe, entre ellos Cuba, o en su lugar alterar sustancialmente la estructura de la Oficina de Transmisiones a Cuba. ¿Nuestros lectores querrían saber qué significa y por qué fue necesario ese acápite?

MDB: El presidente Obama supuso en su presupuesto que la Voz de América y la Oficina de Transmisiones a Cuba se asimilarían y pretendía la privatización de la OCB. Sin embargo, las misiones de VOA y OCB son completamente diferentes. Una se encuentra en Washington y la otra en Miami y tienen muy diferentes formatos y audiencias. De hecho, lo único que VOA y OCB tienen en común es que ambas están en español. VOA transmite noticias estadounidenses a su audiencia. OCB, por el contrario, debe contrarrestar los esfuerzos del régimen de Castro para que el pueblo cubano no tenga acceso a información libre, y sus transmisiones están dirigidas a una audiencia con un acceso muy limitado a medios externos e independientes.

Obama propuso fusionar OCB con VOA y la privatización de la OCB, después de años de cortar el presupuesto de OCB. Desde que asumió el cargo, el presidente Obama ha solicitado cada año recortar de 13% a 15% del presupuesto de OCB. Para 2016, Obama pidió, sin embargo, un mayor presupuesto para OCB pero sólo porque él lo combinó con el de VOA. Obama es un conservador fiscal sólo cuando se trata de ahorrar el dinero disponible para burlar el cerco informativo impuesto al pueblo cubano por parte del régimen de Castro. Él ha tratado constantemente de reducir el presupuesto de OCB cada año, y muchos creen que sus esfuerzos por privatizar las transmisiones a Cuba mediante Radio y TV Martí no son más que otro intento de reducir su capacidad de llevar información libre al pueblo de la isla.

AA: ¿De ser aprobado este Proyecto de Ley a quién cree que afectaría directamente dentro de Cuba?

MDB: La ley de asignaciones para el Departamento de Estado y Operaciones Exteriores especifica que $30 millones deben ir a la oposición prodemocracia en Cuba que está luchando por los Derechos Humanos y las libertades fundamentales y arriesgando todo por eso. Ese dinero se destina a la promoción de la sociedad civil, a apoyar a las familias de los presos políticos que perdieron sus medios de vida y las cartillas de racionamiento por atreverse a expresar sus opiniones. Este dinero apoya la democracia, ayudando a los periodistas independientes, artistas, activistas laborales y líderes religiosos a expresar sus opiniones, a organizar y dar a conocer sus actividades en Cuba.

La financiación para la Oficina de Transmisiones a Cuba garantiza que la información objetiva pueda llegar al pueblo cubano a través de la radio y la televisión, y eso es esencial para una transición a la democracia en Cuba.

Otras disposiciones de la ley, tales como la prohibición de fondos para las embajadas y la prohibición de visados a los altos funcionarios del Partido Comunista y oficiales militares, también fomenta importantes objetivos de política exterior de Estados Unidos y de solidaridad con el pueblo cubano, no con sus opresores. El Congreso de Estados Unidos ha demostrado su firme apoyo a la gente oprimida en Cuba año tras año y continuará haciéndolo mediante el apoyo a las sanciones contra el régimen brutalmente represivo de los Castro, a la vez que apoya a los líderes prodemocracia que representan la Cuba del futuro.

AA: Nuestros lectores querrían saber si en caso de que llegue a la Casa Blanca un republicano en las próximas elecciones puede revertir el proceso de restablecimiento de relaciones entre EEUU y el general Raúl Castro.

MDB: Sí, cualquier presidente podría revertir lo que Obama ha hecho en lo que respecta a la política de Estados Unidos hacia Cuba. El Congreso de Estados Unidos no admite las aparentemente ilimitadas concesiones y apaciguamientos de la dictadura de los Castro por parte del Presidente. En verdad él no ha podido aprobar ninguna ley que modifique la relación de Estados Unidos con Cuba. Todo lo que ha hecho puede ser perfectamente revertido por los presidentes subsiguientes.

AA: Al momento de cerrar este cuestionario me llega la información de que la Cámara de Representantes acaba de votar ampliamente contra la Enmienda Farr. ¿A quién beneficia y a quién perjudica dentro de Cuba la anulación de dicha enmienda?

MDB: La votación abrumadora en contra de la Enmienda Farr, que habría eliminado la disposición de la ley de asignaciones de Comercio, Justicia y Ciencia de prohibir las exportaciones a los militares cubanos, ayuda al pueblo cubano. El presidente Obama dijo que quería más recursos para llegar al pueblo de Cuba y justificó sus cambios en la política de Estados Unidos como un medio para promover la independencia del pueblo cubano de las autoridades. El proyecto de ley sólo prohíbe las exportaciones a los militares cubanos que, a través del Ministerio del Interior, son el aparato encargado de la represión contra el pueblo cubano. Así que, simplemente, el fracaso de la Enmienda Farr es un triunfo rotundo para el pueblo cubano. Obviamente una cosa es el pueblo cubano y otra el régimen que lo oprime.

Vea las declaraciones del congresista a TV Martí

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Mario Diaz-Balart ratifica apoyo al pueblo de Cuba