Disidentes expulsados de la capital china antes del aniversario de la matanza en Tiananmén

Un manifestante herido sostiene el casco de un militar en la Plaza de Tiananmén el 4 de junio de 1989 (Archivo/Shunsuke Akatsuka/Reuters).

Las autoridades de Beijing están obligando a los disidentes y los activistas de los derechos humanos a abandonar la ciudad, en vísperas del políticamente sensible aniversario del 4 de junio de 1989, fecha de la matanza en la plaza de Tiananmén, informó Radio Asia Libre.

El grupo de Madres de las Víctimas de Tiananmén emitió su declaración anual con un llamado al Partido Comunista de China para que se proceda con una compensación por las muertes y una histórica reevaluación del movimiento estudiantil de 1989 y de la masacre de civiles desarmados perpetrada por el Ejército de Liberación Nacional, para que los responsables sean llevados ante la justicia.

El grupo recordó que el 4 de junio de 1989, el Ejército de Liberación Nacional despachó tanques y soldados para que controlaran por la fuerza y mataran a estudiantes desarmados que pedían en la plaza de Tiananmén democracia y libertad.

Agrega que desde que la tragedia tuviera lugar, hace 32 años, se prohíbe que los ciudadanos conmemoren a quienes resultaran muertos y que lo trágico es que la generación actual no tiene conocimiento de lo acontecido y muchos incluso, dudan de que en realidad haya sucedido.

Zhang Xianling, miembro de las Madres de Tiananmén cuyo hijo de 19 años de edad, Wang Nan, fuera muerto a tiros por el Ejército, mantiene que las demandas del grupo se han mantenido constantes.

La primera demanda –dijo—es que quieren saber la verdad de lo que sucedió; la segunda es que se demanda compensación por las muertes y la tercera es que se reconozca la responsabilidad de los hechos criminales que tuvieran lugar en aquel fatídico día.