Dos proyectos de ley idénticas, uno en la Cámara de Representantes y otro en el Senado de Estados Unidos, piden autorizar los viajes a Cuba.
El congresista demócrata de Massachusetts Jim McGovern presentó el jueves pasado en la Cámara un proyecto que pide levantar las restricciones que enfrentan los estadounidenses para viajar a Cuba, y dijo que el lunes una medida idéntica será propuesta en el Senado.
McGovern destacó en un comunicado que su colega Patrick Leahy, con el apoyo de otros 45 senadores, presentará la medida.
El legislador de Massachusetts ha criticado duramente la legislación actual porque restringe el derecho de movimiento de los estadounidenses.
“Cada estadounidense debería tener la libertad de viajar”, dijo McGovern, pero la prohibición “castiga a los estadounidenses – nuestros mejores embajadores – e impide que se contacten de forma directa con el pueblo cubano”.
McGovern explicó que la medida también levantaría las restricciones en torno a transacciones ligadas a los viajes, como por ejemplo las transacciones bancarias.
McGovern afirmó que Cuba es el único país prohibido por ley como destino de viaje de los estadounidenses, quienes pueden visitar otros lugares donde se violan los derechos humanos, como China, Arabia Saudita, Vietnam, Rusia, Irán y Siria. Hasta hace poco, dijo, los estadounidenses podían ir a Corea del Norte.
Organizaciones no gubernamentales como Engage Cuba y la Oficina de Washington para América Latina, WOLA, han dado su respaldo a estos proyectos de ley.
Engage Cuba repitió en Twitter un mensaje del legislador Tom Emmer, quien argumentó que los estadounidenses que viajan pueden hacer maravillas para la democracia, particularmente en Cuba.
En un comunicado aparte, el senador Leahy planteó el mismo razonamiento.
Dijo que presentará La Ley de Libertad de los Estadounidenses de Viajar a Cuba 2019 por una sola razón: para que los estadounidenses puedan viajar a Cuba de la misma manera en la que viajan a todos los países del mundo con excepción de Corea del Norte, donde existe una prohibición por decreto presidencial.
“Es indefensible que el gobierno federal restrinja a los ciudadanos y residentes legales de EE.UU. viajar a un pequeño país a 90 millas que no representa una amenaza a nosotros”, dijo Leahy.
Es una medida para eliminar las restricciones de viaje, sin eliminar el embargo, recalcó el senador de Vermont tras citar un sondeo de CBS que dice que los estadounidenses (81%) apoyan poder ir a la isla.
Acerca de los derechos humanos en Cuba, Leahy dijo que él y sus colegas quieren ver el cese de la represión política, y que los arrestos y malos tratos a los disidentes tienen que ser condenados.
Sin embargo, opina que las personas que piensan que más presión económica o exigencias van a obligar a las autoridades cubanas a cesar el arresto de disidentes y abrazar la democracia no han aprendido nada de la historia.