Estados Unidos anunció el viernes que blindará la vigilancia y patrullaje del Estrecho de la Florida, ante el aumento reciente en la migración marítima irregular que se origina en las Bahamas y Cuba, también desde Haití, a través del Paso de Barlovento y de la República Dominicana a Puerto Rico, a través del Paso de Mona.
El Departamento de Seguridad Nacional, responsable de disuadir, prevenir y responder a la migración marítima ilegal, anunció la participación de varias agencias federales, estatales y locales en el grupo de trabajo HSTF-SE, creado desde 2003 para "evitar la pérdida de vidas en el mar y desalentar y disuadir la migración marítima" y aumentar las patrullas y los operativos por tierra, aire y mar, de día y de noche.
El plan operativo permitirá ajustar los recursos y el desempeño de las autoridades según sea necesario, en función de las tendencias de migración marítima ilegal. En lo que va de año fiscal la Guardia Costera de EEUU ha detectado a más de cinco mil inmigrantes cubanos.
En Miami, la Patrulla Fronteriza anunció que se compromete a trabajar "en un esfuerzo de todo el gobierno para prepararse y abordar cualquier aumento potencial en la migración marítima irregular o las amenazas a la seguridad fronteriza en Florida”, dijo Walter N. Slosar, Jefe de patrulla del sector de Miami de la Patrulla Fronteriza y subdirector de HSTF-SE.
El HSTF-SE incluye la Guardia Costera, los departamentos de Defensa, Estado, Justicia, Salud y Servicios Humanos, Seguridad Nacional, la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias, la Administración de Seguridad del Transporte, los Servicios de Ciudadanía e Inmigración, el Servicio Secreto y agencias estatales y locales, incluidos representantes de los condados Palm Beach, Broward, Miami-Dade y Monroe.
La cooperación de estas agencias permite detectar e interceptar las operaciones marítimas ilegales; interceptar a los migrantes que aterrizan en las playas de Florida y las islas y territorios estadounidenses en el Caribe; detener a los contrabandistas de personas e investigar las organizaciones criminales transnacionales que se benefician de estas actividades ilegales; brindar atención médica a los migrantes a bordo de las embarcaciones de la Guardia Costera y tratar cualquier necesidad inmediata y hacer cumplir la ley de inmigración.
Las personas que intenten ingresar ilegalmente al país por mar serán interceptadas y repatriadas a su país de origen o al país del que partieron, de conformidad con las leyes, las políticas y las obligaciones de los tratados internacionales de los EE. UU.
Este sábado, 42 balseros cubanos fueron puestos bajo custodia de la Patrulla Fronteriza tras desembarcar en dos puntos diferentes del sur de la Florida, 21 de ellos en Dry Tortugas y 21 en Islamorada, informó en Twitter Walter N. Slosar, jefe de la CBP.
El viernes, 45 migrantes cubanos fueron rescatados y detenidos al encallar su barco pesquero en las inmediaciones de Cayos Marquesas, un conjunto de islotes deshabitados del sur de Florida.
La mañana del viernes, otros 24 inmigrantes fueron detenidos en Islamorada, en los Cayos de la Florida, tras el naufragio de una embarcación que dejó una persona desaparecida.
En Twitter, el séptimo distrito de la Guardia Costera de Estados Unidos señaló que varias de sus tripulaciones respondieron al aviso de "un buen samaritano" tras un naufragio de una precaria embarcación en Islamorada, uno de los turísticos cayos del sur de Florida.
Sin indicar la nacionalidad de los náufragos, la Guardia Costera dijo que 20 inmigrantes rescatados en el mar permanecen bajo su custodia y cuatro que alcanzaron tierra tras el naufragio lo están bajo la de CBP en el sector de Miami.
"Continúa la búsqueda de una persona reportada como desaparecida", informó la institución, y añadió que este naufragio es "resultado de una aventura de inmigrantes ilegales".
El jueves, agentes de CBP detuvieron tras tocar tierra, también en Islamorada, a 17 inmigrantes cubanos que viajaban en una "rústica embarcación", según informó Slosar en Twitter.
Ese mismo día otra docena de inmigrantes fue interceptada el jueves en el mar frente a Hollywood Beach, al norte de Miami, mientras otros tres que lograron alcanzar la costa en ese mismo lugar fueron detenidos por agentes de CBP.