Cuba podría ser la próxima frontera en la búsqueda de talentos por parte de las grandes compañías tecnológicas, pronostica un artículo publicado en la sección informativa Pulse de la red de contactos y oportunidades profesionales Linkedin.
El talento tecnológico de la India es explotado por las grandes compañías.
El autor, Anthony Onesto, asesor de recursos humanos a futuro para compañías tecnológicas de alto crecimiento, señala que en la búsqueda de nuevas reservas de talento tecnológico menos costoso las compañías ya han explorado y explotado las de la India, China, Colombia, Ucrania y otros destinos, pero ahora deben enfocarse en lugares con menor diferencia de horarios y abiertos a la expansión.
Onesto recomienda a las empresas del sector empezar a establecer una presencia en Cuba.
La reciente reanudación de relaciones diplomáticas entre Washington y La Habana "representa una enorme oportunidad para que las compañías tecnológicas empiecen a desarrollar y entrenar talentos en el mercado cubano, uno que está todavía virgen en ese sentido, y con hambre de innovaciones y oportunidades tecnológicas", señala.
La Universidad de Ciencias Informáticas de Cuba genera divisas al país mediante la exportación de proyectos y soluciones.
Compara las posibilidades de Cuba para el talento tecnológico con las de Colombia, donde él trabajó como contratista de recursos humanos para la primera compañía que se dio cuenta del potencial del país.
Luego de identificar los recursos disponibles y de coordinar con el gobierno local y las universidades, la firma Zemoga estableció una vibrante operación productiva en Colombia, con excelentes resultados en los campos de desarrollo, creatividad y facilidades para el usuario.
Hoy Colombia es buscada por grandes compañías de tecnología y su reserva de talentos compite con la de ciudades como San Francisco, añade.
El especialista en recursos humanos señala que, si bien la obtención de ganancias puede tardar un tiempo, como sucedió con Zemoga en el país andino, está claro que empezar a pensar en Cuba como nuevo centro tecnológico sería una inversión sensata.
Una que, paralelamente, puede contribuir al desarrollo de un país empobrecido mediante la introducción de nueva y muy demandada experticia, y de un sentido empresarial que ayude a energizar al pueblo cubano, termina diciendo el autor.