Los usuarios podrían usar sus planes de datos para navegar en la Web y enviar textos y correos, pero las llamadas se consideran demasiado invasivas.
Estados Unidos se acercó el jueves a permitir el uso de teléfonos celulares durante los viajes aéreos, a condición de que los pasajeros no los usen... para hacer llamadas.
La Comisión Federal de Comunicaciones votó 3-2 para considerar el levantamiento de la prohibición de usar teléfonos celulares en vuelos comerciales, incluso para llamar.
Pero el mismo día, el Departamento Federal de Transporte y tres miembros del Congreso tomaron medidas para bloquear las llamadas.
De ser aprobada sin la autorización para llamar, la nueva normativa significaría que los consumidores podrían utilizar sus planes de datos para navegar por la Web o enviar correos electrónicos y mensajes de texto una vez que el avión en que viajan alcance los 10.000 pies, unos 3.000 metros de altura.
Sin embargo —muchos detalles tienen que ser aún resueltos. Las autoridades federales de transporte, por ejemplo, dijeron que aún no saben cómo detendrían —o si sancionarían— a pasajeros cuyos teléfonos empiecen a timbrar en medio de un vuelo.
Tampoco está claro si las aerolíneas podrán ofrecer el servicio y si se añadirían cargos a los pasajeros que utilicen los planes de datos durante un vuelo.
El mes pasado, el gobierno propuso permitir a los pasajeros utilizar sus teléfonos móviles para todo lo que quisieran, incluyendo llamadas. Pero la propuesta de inmediato desató una tormenta de críticas por parte de viajeros, auxiliares de vuelo y legisladores, aduciendo que las conversaciones telefónicas desde un avión molestarían a los demás a bordo.
El diario The Washington Post precisa que la idea de permitir llamadas desde teléfonos móviles en los aviones fue presentada el mes pasado por Tom Wheeler, presidente de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC), en un esfuerzo por actualizar las reglas del organismo gubernamental. La propuesta no obligaría a las compañías aéreas a instalar la tecnología celular en los aviones,explicó Wheeler. Simplemente les daría la capacidad de ofrecer el servicio.
La iniciativa de la FCC también fue recibida con escepticismo por las líneas aéreas, que tendrán la última palabra en las llamadas desde teléfonos celulares durante sus vuelos.
La Comisión Federal de Comunicaciones votó 3-2 para considerar el levantamiento de la prohibición de usar teléfonos celulares en vuelos comerciales, incluso para llamar.
Pero el mismo día, el Departamento Federal de Transporte y tres miembros del Congreso tomaron medidas para bloquear las llamadas.
De ser aprobada sin la autorización para llamar, la nueva normativa significaría que los consumidores podrían utilizar sus planes de datos para navegar por la Web o enviar correos electrónicos y mensajes de texto una vez que el avión en que viajan alcance los 10.000 pies, unos 3.000 metros de altura.
Sin embargo —muchos detalles tienen que ser aún resueltos. Las autoridades federales de transporte, por ejemplo, dijeron que aún no saben cómo detendrían —o si sancionarían— a pasajeros cuyos teléfonos empiecen a timbrar en medio de un vuelo.
Tampoco está claro si las aerolíneas podrán ofrecer el servicio y si se añadirían cargos a los pasajeros que utilicen los planes de datos durante un vuelo.
El mes pasado, el gobierno propuso permitir a los pasajeros utilizar sus teléfonos móviles para todo lo que quisieran, incluyendo llamadas. Pero la propuesta de inmediato desató una tormenta de críticas por parte de viajeros, auxiliares de vuelo y legisladores, aduciendo que las conversaciones telefónicas desde un avión molestarían a los demás a bordo.
El diario The Washington Post precisa que la idea de permitir llamadas desde teléfonos móviles en los aviones fue presentada el mes pasado por Tom Wheeler, presidente de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC), en un esfuerzo por actualizar las reglas del organismo gubernamental. La propuesta no obligaría a las compañías aéreas a instalar la tecnología celular en los aviones,explicó Wheeler. Simplemente les daría la capacidad de ofrecer el servicio.
La iniciativa de la FCC también fue recibida con escepticismo por las líneas aéreas, que tendrán la última palabra en las llamadas desde teléfonos celulares durante sus vuelos.