El embajador de Estados Unidos ante la Organización de los Estados Americanos (OEA), Francisco Mora, declaró el 28 de junio en la clausura de la 54 Asamblea General que se llevó a cabo en Asunción, Paraguay, que la organización debe mantener la visión de un hemisferio “donde los derechos humanos son respetados, la democracia florece y cada persona puede vivir con dignidad y en libertad”.
“Yo reiteré el compromiso de Estados Unidos de promover la democracia representativa a través de nuevas iniciativas de la OEA, incluyendo la enseñanza de valores cívicos y derechos humanos, la creación de nuevos mecanismos basados en información empírica para asistir en las decisiones en sistemas democráticos y el fomento de vínculos legislativos a nivel regional”, subrayó el embajador Mora.
En la Asamblea General de la OEA, el subsecretario de Estado para Gestión y Recursos, Richard Verma, dijo que Estados Unidos seguirá trabajando para fortalecer que considera “la organización preeminente de la región”.
Tras concluir la Asamblea General, el Departamento de Estado destacó algunos logros clave del evento, como fortalecer la defensa de la Carta Democrática Interamericana.
Los Estados miembros reafirmaron que las misiones de observación electoral de la OEA “continúan sirviendo como un medio importante para promover elecciones libres y justas en las Américas, incluso en los Estados Unidos”, señaló el Departamento de Estado.
Acerca de los derechos humanos e inclusión social, la delegación de Estados Unidos ante la OEA reiteró su compromiso de defender las libertades fundamentales de todos, y encabezó esfuerzos para arrojar luz sobre los desafíos y abusos regionales en materia de derechos humanos, copatrocinando una resolución en la que instaba al gobierno de Nicaragua a restablecer los derechos de sus ciudadanos.
Estados Unidos también presentó resoluciones sobre la libertad de religión o creencias, la protección social y las oportunidades inclusivas, la diversidad y la transparencia en las elecciones a los órganos interamericanos de derechos humanos, y los derechos humanos de las personas LGBTI+.
Durante la Asamblea General, Estados Unidos también enfatizó su firme apoyo a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), y su política de buscar respuestas multilaterales y colectivas a las amenazas convencionales y emergentes a la seguridad en las Américas.
Como Presidente Interino del Grupo de Trabajo de la OEA sobre Haití, Estados Unidos presentó una resolución para abordar la grave situación de seguridad en Haití centrada en la ayuda humanitaria, el apoyo a la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS), así como los esfuerzos del nuevo gobierno del país para restaurar el estado de derecho y celebrar elecciones libres y justas.