EEUU sanciona a funcionarios cubanos debido a las injustas condenas del 11J

Manifestación pacífica contra el régimen comunista frente al Capitolio Nacional de Cuba el pasado 11 de julio. (Reuters).

“Debido a las duras e injustas sentencias impuestas a manifestantes pacíficos, el Departamento de Estado tomó hoy medidas para imponer restricciones de visa a ocho funcionarios cubanos implicados en los intentos de silenciar las voces del pueblo cubano”, dijo en un comunicado el secretario de Estado, Antony Blinken.

El texto precisa que el Departamento de Estado implementó estas acciones específicas de conformidad con la Proclamación Presidencial 5377, que suspende la entrada de no inmigrantes a los Estados Unidos de funcionarios y empleados del gobierno cubano.

“Estos ocho individuos incluyen funcionarios cubanos relacionados con la detención, sentencia y encarcelamiento de manifestantes pacíficos del 11 de julio. Estados Unidos tomó medidas para hacer cumplir las restricciones de visa en respuesta a los intentos del gobierno cubano de negarles a los cubanos su libertad y derechos a través de tácticas de intimidación continuas, encarcelamiento injusto y sentencias severas”, dijo Blinken.

"Aproximadamente 600 manifestantes en toda la isla siguen encarcelados después de las protestas del 11 de julio”, añadió. “Algunos con condiciones de salud cada vez peores y sin acceso a alimentos adecuados, medicamentos o llamadas a sus seres queridos”.

Estas restricciones de visa refuerzan el compromiso de EE. UU. de apoyar al pueblo cubano y promover la rendición de cuentas de los funcionarios cubanos que permiten la afrenta del régimen a la democracia y los derechos humanos, explicó Blinken.

“Estas acciones magnifican el impacto de cuatro sanciones del Departamento del Tesoro promulgadas desde el 11 de julio y el anuncio del Departamento el 30 de noviembre de restricciones de visa a nueve funcionarios cubanos relacionados con la represión de los activistas del 15 de noviembre. Estados Unidos continúa utilizando todas las herramientas diplomáticas y económicas apropiadas para presionar por la liberación de los presos políticos y para apoyar el llamado del pueblo cubano a una mayor libertad y gobernabilidad”, concluyó.