Rusia aseguró hoy que aún hay posibilidades para la diplomacia en torno a las tensiones en la frontera con Ucrania.
En una reunión en el Kremlin, el jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, dijo que Rusia no puede negociar para siempre, pero que "siempre hay posibilidades".
Lavrov indicó, en conversación con el presidente Vladimir Putin y ante la prensa mundial, que Rusia seguirá buscando respuestas a los problemas de seguridad en Europa. Agregó que, en su opinión, las posibilidades de Rusia "están lejos de agotarse", aunque recalcó que las negociaciones no deben eternizarse.
Moscú ha señalado que está dispuesto a continuar las conversaciones con Occidente para aliviar la crisis sobre Ucrania cuando el canciller alemán Olaf Scholz se embarcó en otra ronda de diplomacia con una visita a Kiev, diciendo que "no había una justificación razonable" para la acumulación de Rusia de tropas en zonas fronterizas que muchos temen que puedan ser preparativos para invadir a su vecino.
Radio Europa Libre/Radio Libertad reporta que Scholz se reunió con el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskiy durante dos horas el 14 de febrero e instó a Rusia a tomar medidas inmediatas para reducir las tensiones provocadas por la acumulación de aproximadamente 130.000 soldados cerca de la frontera con Ucrania, y agregó que el Kremlin debería aceptar ofertas para discutir seguridad europea.
La Casa Blanca ha dicho que Rusia podría estar planeando invadir Ucrania, una antigua república soviética, "cualquier día de estos".
Rusia dice que no tiene ningún plan para invadir, pero al mismo tiempo quiere garantías en cuestiones de seguridad europea, incluido el compromiso de la OTAN de no expandirse a países como Ucrania u otra ex república soviética, Georgia.
"Estamos listos para un diálogo serio con Rusia sobre cuestiones de seguridad europea", dijo Scholz en una conferencia de prensa después de reunirse con Zelenskiy, y dijo que Alemania estaba extendiendo un nuevo crédito de 150 millones de euros a Ucrania.
El anuncio de financiación se produjo horas después de que el Grupo de las Siete grandes economías occidentales (G7) advirtiera a Rusia de las consecuencias económicas "enormes" si invadía.
Por su parte, Zelenskiy dijo que Ucrania continuaría persiguiendo su objetivo de ser miembro de la OTAN a pesar de la ira de Rusia y el escepticismo de algunos países occidentales sobre la medida.
El primer ministro Boris Johnson se hizo eco de las advertencias de EE. UU. de que una invasión rusa de Ucrania podría ser inminente.
"Estamos al borde de un precipicio, pero todavía hay tiempo para que el presidente Putin dé un paso atrás", dijo Johnson.
(Con información de Efe, AP y RFE/RL)