La actriz Elisabeth Moss cree que desde hace unos años la industria del entretenimiento "está comenzando a sacar a la luz historias sobre mujeres que aún no han sido contadas", como su última película "The Kitchen", protagonizada junto a Tiffany Haddish y Melissa McCarthy.
En la cinta, que llega mañana a los cines estadounidenses, el trío interpreta a un grupo de mujeres de la década de 1970 que comienzan a relacionarse con las mafias de Nueva York al tener que ocuparse de los negocios ilegales de sus maridos, encarcelados por las autoridades en el barrio de Hell's Kitchen, ubicado en el oeste de la Gran Manzana.
"Es una de esas historias que aún no habían sido contadas y creo que por eso es interesante que haya proyectos con mujeres involucradas. Estamos sacando a la luz relatos que hasta ahora nadie conocía", explica Moss en una entrevista con EFE junto a sus compañeras de reparto.
Precisamente, la película dirigida por la cineasta Andrea Berloff ha llamado la atención de la industria cinematográfica por narrar una historia de mafia y crimen desde el punto de vista de la mujer, con un reparto muy valorado por el público y la crítica.
"Tenemos la oportunidad de contar el otro lado de la historia. Por eso es importante que haya más mujeres en la industria como el caso de esta película, dirigida y escrita también por una mujer", defiende la actriz premiada por sus papeles en la serie "The Handmaid's Tale" y "Mad Men", ambos con un fuerte vínculo feminista.
A su lado, sus compañeras de reparto, Haddish y McCarthy, asienten cada una de las palabras que Moss pronuncia, hasta que McCarthy toma la palabra.
"Creo que la cosas van progresando, con pasos de bebé y a veces algunos hacia atrás. Pero aun así creo que el mundo debe cambiar drásticamente", sentencia.
Justo al comienzo de "The Kitchen" suena el estribillo de la canción "It's a Man's Man's Man's World" que dice "este es un mundo de hombres", pero pronto el foco se posa sobre los papeles del trío de intérpretes.
"Es importante ver a tres mujeres liderando una película así", señala McCarthy.
Su personaje como esposa de un mafioso envuelta en la vida criminal y madre de dos hijos es quizás el que afronta problemas más cotidianos por su condición de mujer en una época y un ambiente aún más adverso contra ellas.
"Muchos de los problemas que aparecen en el filme son reales en el mundo -considera-. No tenemos las mismas oportunidades, nuestras habilidades a veces no cuentan igual".
En ese punto es donde la actriz encuentra un sentido a su trabajo y papel: "Ver los problemas de las demás hacen sentir que no estás sola, que la gente tiene inseguridades, se preocupa por su familia... y eso nos hace estar juntas".
Precisamente, uno de los desencadenantes que llevan a las protagonistas a involucrarse en el violento pero lucrativo negocio de la mafia neoyorquina es su dificultad para encontrar un empleo al ser mujeres, con dedicación a la familia y poca experiencia previa.
Al recordar ese aspecto, Haddish defiende a su personaje: "No sigue el camino correcto, pero es una mujer fuerte que tiene sueños, ambiciones y está dispuesta a cumplirlos", asegura.
A pesar del tono reivindicativo de las actrices, no todo es político en "The Kitchen", pues en verdad el filme es una cinta de acción y crimen que recupera la frenética ciudad de Nueva York de los años 1970 y sus negocios sucios a base de corrupción, amenazas y pistolas, muchas pistolas.
"No fue difícil grabar con pistolas", recuerda McCarthy. Sin embargo, su compañera Haddish deja un recado muy ligado a la trágica actualidad.
"Las pistolas en el cine, no por ahí fuera", sentencia.