Encarcelado, sin petición fiscal y enfermo, activista que denunció en redes la corrupción en Cuba

El activista Alexander Fábregas Milanés, en una imagen de archivo.

Alexander Fábregas enfrenta un cargo de "propaganda contra el orden constitucional" por publicaciones críticas al régimen cubano en las redes sociales.

El preso político Alexander Fábregas Milanés, en prisión preventiva en el penal La Pendiente de Villa Clara, envió un mensaje a la comunidad de exiliados en el que afirma que no dejará de pedir la libertad de Cuba.

“Dice que él se va a mantener firme en sus ideas, que él no va a claudicar y que él nunca va a dejar de luchar por la libertad de Cuba”, comunicó en conversación con Martí Noticias la madre del activista espirituano, María Luisa Milanés, quien alertó que su hijo lleva tres meses recluido y no se le ha dado documento alguno que justifique su encarcelamiento.

El joven de 34 años enfrenta un cargo de "propaganda contra el orden constitucional" por exponer, en las redes sociales la corrupción y los atropellos del régimen cubano.

Aun no le han entregado la petición fiscal, por lo que desconoce si tendrá otras acusaciones o su posible sentencia.

El cargo de propaganda contra el orden constitucional conlleva condenas de 3 a 10 años de cárcel.

“Hasta ahora no tiene ningún tipo de documento, no le dicen nada”, lamentó la madre, que recordó que Fábregas Milanés estuvo más de 11 días incomunicado en la sede de la Seguridad del Estado, en la capital villaclareña, presuntamente, por hacer denuncias contra el régimen en las redes sociales.

“En estos momentos se encuentra enfermo, sin atención médica. Un solo día nada más le preguntaron que si tenía fiebre, y le dieron un paracetamol. Las condiciones de la comida son pésimas, igual que en el resto de los establecimientos penitenciarios cubanos”, señaló la mujer que visitó a su hijo el martes.

Fábregas Milanés ya había cumplido una condena de nueve meses de prisión por el delito de “desórdenes públicos”, por su implicación en las protestas populares del 11 de julio de 2021 en la ciudad de Sancti Spíritus.

Según la compilación de la organización Prisoners Defenders, el activista no asistió, físicamente, a la demostración, solo hizo una transmisión en vivo a través de Facebook, instando a la gente a que saliera a la calle.