Más de mil familias cubanas no pueden celebrar este domingo el Día de los Padres porque algunos de sus hijos, o sus padres, están recluidos. Son los hombres que el régimen cubano tiene en prisión por reclamar derechos fundamentales.
“Hoy que tengo la oportunidad, quisiera pedir, desde el fondo de mi corazón, la libertad para todos los presos políticos que hay en Cuba, que están pasando por la misma situación que yo pasé”, destacó en conversación con Martí Noticias Samuel Pupo Martínez, quien cumplió recientemente su sentencia por participar en las protestas del 11 de julio en Cárdenas, en la provincia de Matanzas.
“Quiero dar testimonio de lo desgarrador y preocupante que fue estar preso y que llegara el Día de los Padres y no poder estar junto a mi niño. Tenía 12 años cuando caí preso y nunca me había separado de él. Esa es una edad muy difícil, donde se tienen muchas dudas y preocupaciones, y yo no estaba ahí para aconsejarlo”, señaló.
Hugh Dieter Pupo Santana, el hijo de Pupo Martínez, escribió en Facebook a su padre un mensaje.
Lee también Díaz-Canel felicita a los padres: cubanos le recuerdan por qué no pueden celebrar“Después de casi tres años de que no estuvieras. Es el primer día de los padres que pasaremos juntos. Yo pensaba que te morirías en ésa cárcel. Recuerdo el día de tu llegada a casa con mamá, estabas muy flaquito, ojeroso y alterado. Nunca lo borraré de mi mente, pero estábamos felices después de tanto sufrimiento… Gracias por ser el mejor papá del mundo”, escribió el niño.
"Yo temía que le pasara algo a mi hijo, cuando recibió hasta una citación oficial de Menores [Dirección de Atención a Menores del Ministerio del Interior] y tenía conocimiento de que la Seguridad del Estado preguntaba por él todos los meses en la escuela, algo que nunca entendí”, dijo Pupo Martínez.
En septiembre de 2022, Yuneisy Santana González, la esposa del ex preso político denunció que el hijo de ambos estaba siendo “acosado” por las autoridades de Atención a Menores debido a la situación de su padre.
“Todas esas preocupaciones, y más, venían a mi mente en ese momento. Sentí impotencia, rabia y miedo por él, porque sé de lo que son capaces estos esbirros represores. Psicológicamente estaba afectado y más aún porque no tenía forma de saber de mi niño ese día. Fue algo que nunca olvidaré”, indicó.
A pesar de las vicisitudes de su encarcelamiento, los presos políticos cubanos, a través de sus familiares, afirman que la injusta situación en la que están no los doblega, sino que los llena de fuerzas, pero sienten la tristeza de no poder compartir con sus progenitores o sus hijos, en un día especial.
En general, las autoridades penitenciarias cubanas no aprueban llamadas por teléfono ni visitas en fechas conmemorativas para la familia.
“Es imposible describir el sentimiento de amargura que siento al estar lejos de mi hijo otro año más. Pensando todo el sufrimiento que está pasando por culpa de una dictadura asesina con su pueblo”, lamentó, también desde Cárdenas, Alexander Vila Díaz, padre del manifestante del 11J condenado a 11 años de privación de libertad, Chadrián Vila Sequín.
“Esos jóvenes están muy mal, traumatizados por estar lejos de sus hijos y padres. Chadrian Vila tiene dos hijos, una hembra y un varón, que están creciendo lejos del amor paternal por culpa de un régimen fracasado”, recalcó.
Dayane Murada Blanco, esposa de Orlando Juan Lemes Despaigne, sancionado a cinco años de internamiento tras asistir a las demostraciones del verano de 2021 en Contramaestre, Santiago de Cuba, aseguró que una de los dolores más grandes del preso político es no poder guiar y proveer de las necesidades básicas a sus hijos.
“Le preocupa cantidad que su hija crezca sin la figura paterna. Quiere verla crecer, desarrollarse, que la leche, que si le falta el alimento. Todo eso para él es una situación bastante preocupante”, dijo a Martí Noticias.
“Yo tengo dos, la mayor que va a cumplir ocho años, es hija de otro preso político Ibrahim Domínguez Aguilar. La chiquita, que es de este matrimonio, tiene tres meses nada más. Para nosotros es muy difícil. Mi esposo es muy apegado a sus hijos y le preocupa mucho que no puedo alimentarlos, ni a su familia. Él es el que lo buscaba todo en la casa y al faltar ¿cómo quedamos nosotros?”, expresó Murada Blanco.
Sobre Félix Navarro, cuya única hija, Saylí Navarro, está encarcelada al igual que él por las manifestaciones del 11 de julio de 2021, dijo el Secretario General de la Asociación Sindical Independiente de Cuba (ASIC), Iván Hernández Carrillo:
“Es el padre que eligió ser maestro; el amigo, el hermano, el padre que pide disculpas cuando se equivoca. Es un padre atento, modesto, sencillo, que es su mayor esfuerzo, ha sido y es un ser mejor ejemplo feliz de sus hijos y de las generaciones que como la mía, ha ayudado a formar”.
El Centro de Documentación de Prisiones Cubanas y el programa Justicia 11J recordaron la fecha y pidieron, una vez más, la excarcelación de todos los prisioneros políticos.
“El mensaje principal que podemos enviarle a los presos políticos que son padres, y a su familia, es el deseo de su pronta liberación, que cese la separación familiar a la que han sido obligados por la represión en Cuba y por tener la valentía de ejercer sus derechos sin pedir permiso y que cesen las condiciones arbitrarias y muy precarias en las que están recluidos en prisión”, concluyó Raúl Enrique Medina, responsable de Comunicaciones.