Legisladores republicanos han acusado al Gobierno de Estados Unidos de ocultar algún tipo de información sobre el mortal ataque
La secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, podría reaparecer ante los legisladores el 22 de enero para ser interrogada acerca del ataque mortal al consulado estadounidense en Libia, afirmó un senador este martes, reporta France Press.
El senador Bob Corker, el miembro republicano de mayor rango del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, dijo a la cadena MSNBC que había mantenido conversaciones con los ayudantes de Clinton para establecer una nueva fecha para su comparecencia.
Clinton debía testificar inicialmente a finales de diciembre, luego de que una investigación acusara de "ampliamente inadecuada" la seguridad de los puestos diplomáticos en la ciudad de Bengasi por fracasar en la protección de sus empleados allí.
Pero Clinton se vio obligada a cancelar su comparecencia y enviar a dos vicesecretarios cuando se enfermó de una virulenta infección estomacal a la que siguió una conmoción y un coágulo sanguíneo cerebral.
El embajador Chris Stevens y otros tres estadounidenses resultaron muertos cuando un grupo de militantes fuertemente armados atacaron el edificio del consulado y otro anexo el 11 de septiembre pasado, en el marco de un aterrador asalto de ocho horas de duración.
La junta especial establecida por Clinton para investigar el ataque determinó "fallos sistemáticos y deficiencias de gestión y liderazgo en altos niveles dentro de las dos oficinas del departamento de Estado" responsables de la seguridad.
El secretario asistente, Eric Boswell, jefe de la oficina de seguridad diplomática, dimitió de su puesto luego de que hiciera público el informe y fue junto a otros tres altos dirigentes, asignado a un período de licencia administrativa.
Sin embargo, los legisladores republicanos han estado presionando para que Clinton comparezca ante el Congreso antes de que finalicen sus cuatro años en la oficina en las próximas semanas, luego de acusar al gobierno de Estados Unidos de ocultar algún tipo de información sobre el mortal ataque.
El senador Bob Corker, el miembro republicano de mayor rango del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, dijo a la cadena MSNBC que había mantenido conversaciones con los ayudantes de Clinton para establecer una nueva fecha para su comparecencia.
Clinton debía testificar inicialmente a finales de diciembre, luego de que una investigación acusara de "ampliamente inadecuada" la seguridad de los puestos diplomáticos en la ciudad de Bengasi por fracasar en la protección de sus empleados allí.
Pero Clinton se vio obligada a cancelar su comparecencia y enviar a dos vicesecretarios cuando se enfermó de una virulenta infección estomacal a la que siguió una conmoción y un coágulo sanguíneo cerebral.
El embajador Chris Stevens y otros tres estadounidenses resultaron muertos cuando un grupo de militantes fuertemente armados atacaron el edificio del consulado y otro anexo el 11 de septiembre pasado, en el marco de un aterrador asalto de ocho horas de duración.
La junta especial establecida por Clinton para investigar el ataque determinó "fallos sistemáticos y deficiencias de gestión y liderazgo en altos niveles dentro de las dos oficinas del departamento de Estado" responsables de la seguridad.
El secretario asistente, Eric Boswell, jefe de la oficina de seguridad diplomática, dimitió de su puesto luego de que hiciera público el informe y fue junto a otros tres altos dirigentes, asignado a un período de licencia administrativa.
Sin embargo, los legisladores republicanos han estado presionando para que Clinton comparezca ante el Congreso antes de que finalicen sus cuatro años en la oficina en las próximas semanas, luego de acusar al gobierno de Estados Unidos de ocultar algún tipo de información sobre el mortal ataque.