Experto: Economía cubana acabaría el año estancada o en recesión

Un hombre vende carretes de hilo en una calle de La Habana.

El académico oficialista Pedro Monreal basa su apreciación en un "preocupante" ajuste del pronóstico de crecimiento del PIB cubano hecho por la CEPAL, de 1% a un insignificante 0,5%.

El académico oficialista cubano Pedro Monreal reporta en el semanario digital Sin Permiso que el pasado 12 de octubre la Comisión Económica para América Latina de la ONU, CEPAL, redujo el pronóstico de crecimiento cubano 2017 de 1 % a 0,5 %, lo cual al finalizar el año “significaría en la práctica que, aunque la economía dejaría de estar técnicamente en una recesión, se encontraría en una situación de estancamiento”.

Monreal considera preocupante el ajuste, realizado por el prestigioso organismo apenas dos meses después de su anterior estimación, y dice que es “una mala noticia que, hasta el momento de redactar esta nota, no parece haber sido reflejada en la prensa nacional”.

Apunta que en agosto “el estimado de CEPAL era el doble (1%), una cifra que se aproximaba al registro oficial de 1,1% de crecimiento real para el primer semestre de 2017, aunque inferior al estimado de 2% presentado por el gobierno cubano durante la sesión del parlamento cubano, en diciembre de 2016”.

Observa el autor que desde 2010 las proyecciones que CEPAL divulga en su publicación anual “Estudio Económico de América Latina y el Caribe” se han aproximado bastante a las cifras reales de crecimiento que finalmente se han alcanzado en Cuba.

Agrega que aunque no es posible conocer ahora, de manera precisa, la cifra real de crecimiento del PIB que se alcanzará en 2017, pudiera inferirse de la reciente actualización de CEPAL que el tope superior del cono de probabilidades sería ese 0,5%.

La Actualización de proyecciones de crecimiento de América Latina y el Caribe en 2017 y 2018 también pronostica 0,5 % para 2018 en Cuba, el segundo más bajo de la región, solo por debajo de Venezuela (-8.0 en 2017 y -4.0 en 2018)

El economista cubano detalla los fundamentos del estimado de 1% publicado por CEPAL el 3 de agosto:

"La recuperación de los precios internacionales del petróleo, el níquel y el azúcar, y, sobre todo, porque se espera que la política fiscal dé un importante impulso a la producción. Se proyecta un déficit fiscal de un 12% del PIB, cifra que no se registraba desde 1994, y un incremento de la inversión pública del 49% —que asegura la continuidad o el inicio de importantes obras de infraestructura hidráulica, vial y de vivienda—, además de un aumento del 26% del gasto productivo para impulsar la sustitución de importaciones’”.

“Asimismo, se espera que en 2017 y 2018 se incremente la llegada de inversión extranjera en áreas como las energías renovables (parques eólicos y energía fotovoltaica) y la infraestructura turística”.

Monreal indica que al menos en dos de esas áreas los supuestos no se han materializado, por lo que resultaba racional revisar, hacia la baja, el estimado de julio- agosto.

Dice que “lejos de haber crecido, los precios del azúcar han caído, mientras que los precios del níquel y del petróleo han variado durante los últimos doce meses, registrando incrementos muy moderados que hacen cuestionable afirmar que ha existido una recuperación de precios”.

En cuanto a la inversión, el autor recuerda que el Ministro de Economía y Planificación de Cuba informó en julio a la Asamblea Nacional que “El Plan Anual de Inversiones, se proyecta cumplir al 85 %; no obstante, resultará superior al año anterior un 21 %”. “En vez de incrementarse en 49%, el crecimiento de la inversión parece que no llegará a ser ni la mitad de lo previsto inicialmente”, apunta Monreal.

Termina diciendo el académico que “el hecho de que CEPAL haya hecho un ajuste hacia la baja de su estimación previa pudiera indicar que los expertos de esa institución hubiesen reconocido que han aumentado las probabilidades de ocurrencia de una situación de estancamiento económico y quizás, peor aún, de que se produjese un segundo año consecutivo de recesión económica en Cuba”.

(Artículo del semanario Sin Permiso, reseñado por Rolando Cartaya)