Una familia camagüeyana refugiada en la isla de Saint Kitts and Nevis (San Cristóbal y Nieves) dijo este martes a Radio Martí que llevan dos años escondidos por temor a las amenazas de la embajada de Cuba en esa nación.
Reinier Merodio Abreu contó en entrevista con Judith González, conductora del programa Magdalena de Cuba, de Radio Martí, que salió huyendo de la isla junto a su esposa, Rachel Pérez Ruiz, y sus hijos jimaguas de 3 años de edad, tras serias amenazas de la Seguridad del Estado por su condición de opositor.
Merodio Abreu señaló que la amenaza del Gobierno de quitarle la custodia de sus hijos catapultó la decisión del matrimonio de salir del país.
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Entrevista a Reinier Merodio Abreu
Una vez en San Cristóbal y Nieves, y tras pedir ayuda a través de Facebook, "la embajada de Cuba en este país nos empezó a amenazar de muerte y, por último, con deportación", aseguró el opositor.
Merodio Abreu explicó que desde hace un año esperan una respuesta a su caso por parte de la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) tras un reporte de la Cruz Roja Internacional.
"Estamos en una situación que no podemos pagar ni la leche de los bebés, que no tenemos manera de poder trabajar y prácticamente no podemos salir a la calle por las amenazas", explicó el cubano, y agregó que este mes todavía no saben como van a pagar la renta de la pequeña vivienda donde viven.
El matrimonio salió huyendo de Cuba tras amenazas del régimen de retirarles la custodia de sus dos hijos.
"Estamos ilegales acá, no se nos quiere dar ningún documento para poder trabajar", subrayó.
El padre de familia dijo que los niños no están recibiendo atención médica y que la familia se alimenta gracias a la ayuda de algunos amigos.
Merodio Abreu pidió ayuda para "salir de este infierno" para poner a salvo a su familia y "que ellos puedan tener un futuro".
El opositor dijo que regresar a Cuba no es una opción para ellos porque temen lo peor. "Sabemos que nos puede suceder cualquier cosa" en un país donde la represión está a la orden de día y los encarcelados políticos no tienen garantía de vida en prisión.
"Sí tenemos miedo, muchísimo miedo", recalcó.
La familia pidió ayuda "para salir del infierno" en que están viviendo y poder dar un futuro a sus hijos.
Merodio Abreu dijo que estuvo detenido en dos ocasiones en la capital cubana, por poner carteles antigubernamentales, y por salir en auxilio de un enfermo mental escapado de Mazorra que era apaleado por agentes de policía por gritar consignas en contra de la tiranía.
Esa última vez estuvo retenido durante cinco días, privado de alimentos, y al sexto lo liberaron sin cargos. A partir de ahí, la Seguridad del Estado comenzó a visitar su vivienda y a proferir amenazas contra su familia, dijo el opositor.
Merodio Abreu concluyó que en Cuba podían aguantar cualquier cosa, menos que la amenaza de perder a sus hijos se hiciera realidad. La familia espera que las autoridades competentes ofrezcan una solución definitiva a su caso, y puedan finalmente vivir en libertad.
(A partir de una entrevista concedida a Judith González)