Familiares del líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), José Daniel Ferrer, detenido el 1 de octubre, constataron las condiciones de tortura y atropello que vive en prisión durante una breve visita este jueves autorizada por las autoridades penitenciarias.
El encuentro de los familiares con Ferrer se realizó en una de las oficinas de la prisión Aguadores, en Santiago de Cuba.
Su esposa, Nelva Ismaray Ortega, quien estuvo acompañada de tres hijos menores del opositor durante el encuentro, explicó a Radio y Televisión Martí cómo le encontró.
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En un comunicado divulgado este jueves, la UNPACU agradeció la solidaridad de todos y llamó a la comunidad internacional a adoptar medidas de presión sobre el régimen para que ponga fin a los tratos inhumanos y degradantes que está recibiendo el líder opositor en la prisión.
La visita duró cinco minutos y transcurrió a la vista de un oficial del Ministerio del Interior (MININT). El opositor mostró, según su esposa, las huellas de las torturas recibidas en prisión. Ferrer ha perdido peso corporal y presenta problemas de visión y pérdida de la voz.
El líder de UNPACU relató a su esposa la huelga de hambre que realizó por 25 días y a consecuencias de la cual su salud se ha agravado.
Ferrer ha estado detenido hace 38 días, de ellos 35 sin que sus familiares tuvieran noticias de él.
Carlos Amel Oliva Torres, líder juvenil de UNPACU, publicó en Facebook el comunicado de la organización sobre la situación de Ferrer, en el que se asegura que los familiares "pudieron confirmar que al opositor le están asesinando lentamente".
Según el comunicado, las autoridades pusieron fin a la visita "cuando José Daniel desgarró el uniforme de prisión que le habían puesto por la fuerza, momento en que la familia pudo apreciar los rasgos de las torturas en todo su cuerpo".
Familiares describieron, entre las marcas en el cuerpo de Ferrer, "parte de la cara rayada, hematomas en la parte torácica, abdominal, en las extremidades superiores, inferiores y la espalda", además de "huellas de quemaduras por fricción y marcas de golpes con bastones", explica la nota.
El opositor fue trasladado a la cárcel de Aguadores el 9 de octubre, y encerrado en una celda de castigo. Recibió "una brutal golpiza" y fue obligado a vestir el uniforme de recluso, que luego rompió en protesta. Las autoridades de la cárcel lo han mantenido semidesnudo, salvo en ocho ocasiones "que le pusieron la ropa de prisión contra su voluntad", detalla el comunicado.
Ferrer fue encerrado junto a un preso común, identificado como Israel Frómeta, con un "amplio historial criminal y agresivo", que lo "golpea cada vez que alza la voz y protesta o demanda atención médica".
UNPACU también alertó sobre los otros tres detenidos, José Pupo Chaveco, Fernando González Vaillán y Roilán Zárraga Ferrer, de los que se desconoce su situación dentro de la prisión.
La embajada de Estados Unidos en La Habana insistió en Twitter que Ferrer es víctima de un injusto arresto y exigió su libertad inmediata al régimen cubano.