La coalición Unión Democristiana de Alemania (CDU) / Unión Cristianosocial (CSU), conocida como la “Unión" y considerada como el grupo político más fuerte de Alemania, exigió al gobierno germano que base su política hacia Cuba en el cumplimiento de los derechos humanos.
La moción(20/3492), titulada “Alinear la política hacia Cuba con los derechos humanos”, donde se demanda la libertad de los presos políticos, fue discutida en el Bundestag el jueves y fue remitida al Comité principal de Derechos Humanos y Ayuda Humanitaria.
La facción de la Unión denunció en el Parlamento la violenta represión de las protestas pacíficas en Cuba del 11 de julio, las continuas y sistemáticas violaciones de los derechos humanos y las restricciones masivas a la libertad de expresión y reunión.
Los legisladores recordaron que el número de presos políticos en Cuba nunca ha sido tan alto como el que existe en la actualidad y que en la isla los disidentes son hostigados, perseguidos y arrestados arbitrariamente.
Desde la entrada en vigor del Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación entre la Unión Europea y Cuba, en 2016, no ha habido avances en Cuba para mejorar la situación de los derechos humanos, afirmaron en la moción.
“En cambio, el régimen cubano ha intensificado las restricciones a los derechos humanos y es altamente responsable por violarlos”, sentenciaron los parlamentarios.
"Decenas de miles han dejado sus hogares en los últimos dos años. El historial de derechos humanos de Cuba sigue siendo pobre y más que preocupante. Los gobernantes en el poder responden reiteradamente a las justificadas críticas internacionales sobre la inobservancia de los derechos humanos universales exigiendo la no injerencia
sus asuntos internos, incluso en el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, del cual el país será miembro hasta 2023. En este organismo, Cuba vota regularmente con estados autocráticos como China y Rusia para impedir que se investiguen violaciones graves de los derechos humanos", denuncia la moción.
La Unión expresó que el gobierno federal de Alemania debe "exigir que Cuba respete los derechos humanos universales, en particular los derechos de libertad severamente restringidos, y abordar y condenar públicamente la dramática situación de los derechos humanos y la mala situación de la libertad religiosa, de manera prominente, siempre que sea posible".
Otras demandas de la Unión incluyen la ratificación por parte de Cuba de los pactos internacionales sobre derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales, el uso del mecanismo de sanciones de derechos humanos de la UE contra los responsables de graves violaciones de derechos humanos en la represión de las protestas de julio de 2021, y una investigación sobre la situación de los derechos humanos en Cuba en el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
Además recomiendan que bajo el próximo procedimiento de Examen Periódico Universal en Naciones Unidas, en 2023, se hagan recomendaciones a Cuba para que cese las violaciones a los derechos humanos.
También han pedido que Berlín solicite la entrada y acceso de observadores independientes a Cuba, incluyendo los relatores especiales de las Naciones Unidas y de las organizaciones internacionales de derechos humanos.
Han solicitado que el gobierno alemán intensifique el diálogo con la sociedad civil cubana, en particular en el período previo a los diálogos sobre derechos humanos de la UE y han pedido que Cuba permita el acceso a la sociedad civil al diálogo con los representantes europeos.