La condena de 14 años a la mujer trans Brenda Díaz es justa y racional, dice el Tribunal Supremo de Cuba

La presa política, Brenda Díaz (izquierda) y su madre, Ana María García (derecha).

El Tribunal Supremo cubano mantuvo la condena de 14 años contra Brenda Díaz, la mujer trans encarcelada en el módulo de hombres de una prisión tras participar en las protestas del 11J.

La sentencia, a la ha tenido acceso la agencia de prensa Efe, da por buenos los argumentos del tribunal militar que la sancionó en primera instancia por los delitos de desórdenes públicos y sabotaje al señalar que la pena fue legal, justa y racional.

"Es una condena injusta y discriminatoria", declaró este jueves la Embajada de Estados Unidos en Cuba por medio de Twitter, en un mensaje acompañado por la etiqueta #PresosPorQué?

La Embajada también expresó inquietud por el trato que recibe en la prisión.

“Se han ensañado con ella… no le rebajaron nada, ni un año”, criticó Ana María García, madre de Brenda Díaz, en entrevista telefónica con Efe.

Díaz se encuentra en el pabellón de hombres de la cárcel del municipio Güines (Mayabeque), pese a que no se corresponde con su identidad de género. Se trata de un centro penitenciario especial -con una sección de hombres y otra de mujeres- para personas con el virus del VIH, como ella.

Su madre denunció que su hija fue rapada al momento de ingresar en la prisión y sufrió una agresión sexual dentro de la misma.

En la acusación contra Brenda, la Fiscalía recoge datos que, para la periodista y activista trans Mel Herrera, son "revictimizantes" y "estigmatizantes". Por ejemplo, en el escrito se destaca que Díaz utilizaba un vestido, que es seropositiva y se confunde su identidad de género con una "orientación sexual".

Según las autoridades, Brenda –que durante todo el proceso fue tratada por su nombre legal, Freddy Luis– tiró piedras contra una tienda en divisas de su municipio Güira de Melena, entró en el establecimiento con unos manifestantes y robó un ventilador, una olla de presión y confituras.

En esta segunda sentencia, el Tribunal Supremo amplía y señala que Díaz también se dirigió, con un grupo de personas juzgado en la misma causa, a la sede del Partido Comunista y a una estación de la PNR y gritó consignas contra el sistema político.

La defensa de Díaz presentó un recurso de casación, junto con otras 20 personas. La vista se celebró el pasado 17 de junio.

El Supremo redujo hasta en seis años las sanciones de 11 de las 21 personas en la causa, en su mayoría acusados por los mismos delitos que Brenda.