La Cámara de Representantes aprobó este viernes, por 212 votos contra 200, la Ley de Asignaciones Estatales, Operaciones Extranjeras y Programas Relacionados de 2025, que propone, entre otras cosas, $35 millones de dólares para el financiamiento de la democracia en Cuba.
El presidente del Comité de Apropiaciones de la Cámara de Representantes, el republicano Tom Cole, dijo en un comunicado que la aprobación del proyecto de ley “supone un paso fundamental para garantizar que los estadounidenses estén más seguros en casa y en el extranjero”.
Por su parte, el congresista republicano por la Florida, Mario Díaz-Balart, que preside del Subcomité de Operaciones Exteriores y Programas Relacionados del Departamento de Estado del Comité de Apropiaciones de la Cámara de Representantes, expresó en un comunicado su satisfacción con la aprobación del Proyecto.
El representante dijo que la legislación defiende las prioridades clave de seguridad nacional de Estados Unidos al apoyar a aliados como Israel y Taiwán y contrarrestar a adversarios como la China comunista, los estados terroristas de Irán y Cuba y a las organizaciones terroristas como Hamás y Hezbolá.
“El proyecto de ley de financiación estatal y de operaciones exteriores para el año fiscal 2025 promueve la libertad global, manifiesta una fuerte solidaridad con nuestros aliados y se mantiene firme contra las fuerzas malignas que socavan la seguridad nacional de Estados Unidos”, expresó el cubanoamericano.
Según precisó, la legislación financia las prioridades de seguridad nacional y política exterior, reduce el gasto innecesario y al mismo tiempo defiende valores clave de Estados Unidos.
“Entre las muchas victorias, logramos una reducción del 19% del Presupuesto del Presidente y un recorte del 11% de los niveles promulgados para el año fiscal 2024”, dijo el republicano.
Díaz-Balart opinó que la aprobación en la Cámara pone al grupo en una major posición para comenzar las negociaciones con el Senado.
El miércoles, hablando ante el pleno de la Cámara, el congresista señaló que el proyecto de ley aumenta el apoyo a la libertad y la democracia del pueblo de Cuba al proporcionar $35 millones para financiamiento de la democracia y $35 millones para la Oficina de Transmisiones a Cuba.
“También limita los intentos de la administración Biden de promover el compromiso con los llamados empresarios en la cerrada economía comunista de Cuba. Permítanme ser claro: los únicos empresarios verdaderamente independientes en Cuba están en prisión”, dijo.
La Casa Blanca afirmó en una Declaración de Política fechada el 24 de junio del 2024 que si el proyecto de ley llegara al escritorio del presidente, él lo vetaría ya que, según la administración Biden, este resultaría en cortes profundos para aplicación de la ley, educación, vivienda, atención médica, seguridad del consumidor, programas energéticos y servicios de nutrición esenciales.