La letra y los pronósticos cubanos

Se ofrendó todo un gallinero; aun así las dificultades continuaron e incluso se incrementaron. Marcado por contradicciones inmorales e ilegales, el gobierno cubano mantuvo el poder realizando esfuerzos increíbles.

Si mal no recuerdo, el Consejo Cubano De Sacerdotes Mayores De Ifá profetizó para el 2011 la letra con signo Odí Osa, que quiere decir Ire Achegunota lowo Orunmila, eyelbale adie meyi a Orunmila (Vencimiento de dificultades gracias a Orunmila, dar 2 gallinas en sacrificio a Orunmila) Gobernó el año Ogún, le acompañó Yemayá.

Se ofrendó todo un gallinero; aun así las dificultades continuaron e incluso se incrementaron. Marcado por contradicciones inmorales e ilegales, el gobierno cubano mantuvo el poder realizando esfuerzos increíbles.

En el Sexto Congreso del Partido Comunista se intentaron responder urgencias económicas, políticas y sociales, con burdas manipulaciones de interesantes criterios que de manera obsoleta tratan de poner en marcha.

Desde el punto institucional, buscan regular o reajustar los principales cargos de gobierno y el aparato estatal, con una precisa tendencia a la militarización. Mientras, y como complemento, se prepara la Primera Conferencia Nacional del PCC, a realizarse en enero del 2012. El colofón de la actividad institucional durante el año 2011, fue el octavo período de sesiones de la Asamblea General del Poder Popular, donde se dio a conocer que el Producto Interno Bruto cubano quedo por debajo del por ciento planificado, debido al incumplimiento en las inversiones y los atrasos en la esfera productiva; se exhortó, como novísimo descubrimiento, a cultivar la unidad de los cubanos en torno a la Revolución; se destacó la necesidad, obligada más bien, de un enfrentamiento decidido a las manifestaciones delictivas y de corrupción jugando con la cadena pero nunca con el mono; y como remate de burla, se anunció la excarcelación de casi tres mil reclusos, de los cuales solamente 7 estaban realmente detenidos por claras razones políticas.

Los días previos a la reunión parlamentaria, los medios aseguraron que el General Raúl Castro anunciaría la nueva política migratoria; pero este desvariado Presidente sólo le dedicó al tema un párrafo diminuto en el que dejó anunciada una reformulación “efectiva y lenta”.

Según cifras oficiales, Cuba registró en el 2011 un crecimiento del 7,6% el número de viajeros que visitaron la isla; “turistas” son todas aquellas personas que pasan por el aeropuerto, sean enfermos atendidos por bondades de palacio, doctores que cumplen misiones, artistas que viajan en funciones gubernamentales o intercambios culturales, diplomáticos, funcionarios, delegaciones oficiales, aparato de seguridad, cubanos residentes en Cuba o en el exterior, y por supuesto los turistas reales, conforme su clara y cierta acepción.

El INDER dio a conocer la lista de quienes considera los mejores atletas del año y, como de costumbre, margina de ella a los deportistas encumbrados que residen fuera de Cuba. Por su parte, y pese a los viajes, necedad y gastos de la doctora Mariela Castro, quedó otra vez postergado el nuevo código familiar que empodera con derechos a la comunidad LGBT.

La temporada ciclónica del recién concluido 2011, no tuvo gran trascendencia. De poca actividad, y sin impetuosos huracanes.

La ansiada conexión a Internet, continua siendo un sueño inalcanzable; y el acceso a la tecnología y la información, una falacia.

Por detrás del telón me indican que el consumo de alcohol en la población, creció a niveles alarmantes (obvio, con un presidente con esa proclividad malsana). La cultura sin embargo mantuvo su ritmo acelerado, estimulando la agresividad y la vulgaridad; como ejemplo tenemos que el top de los musicales y el premio de la popularidad, lo obtuviese el contagioso Chupi chupi.

La peregrinación de nuestra santísima virgen, nos mostró que creer en Dios y vivir en Cuba, sigue siendo irresoluto. El gobierno y la santa iglesia parecen ser como un león y un hipopótamo intentándose aparear.

Según estas evidencias, y pese a todos los pronósticos, el General Raúl Castro es un hombre muy “sensible” que padece discapacidad e indiferencia por los problemas del pueblo; pero al igual que su hermano es incapaz de resolverlos.