Las medidas de EEUU son "limitadas" y buscan crear división, reacciona régimen cubano

La subdirectora general de EEUU del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, Johana Tablada, mostró su insatisfacción con las regulaciones aprobadas por Washington. (Yamil Lage/AFP)

Las nuevas regulaciones anunciadas por el gobierno de Estados Unidos siguen siendo limitadas, no alivian el embargo y tienen como objetivo dividir a los cubanos, reaccionó el martes el Ministerio de Relaciones Exteriores.

El canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, se quejó de que las medidas no tuvieran un mayor alcance. En un post en la red social X dijo que las mismas "no revierten [el] cruel impacto y asfixia económica [que] imponen a las familias cubanas [la] aplicación del #BloqueoGenocida e inclusión en lista Estados patrocinadores del terrorismo".

Los cambios regulatorios implementados por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) incluyen el apoyo de la administración del presidente Joe Biden a servicios para promover la libertad de acceso a Internet en la isla y brinda la posibilidad a empresarios independientes del sector privado en Cuba de abrir, mantener y utilizar de forma remota cuentas en bancos estadounidenses, según detalló el Departamento del Tesoro.

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"Estas medidas persiguen crear divisiones dentro de la sociedad cubana, mientras [el] gobierno [de] EEUU financia operaciones de desinformación para responsabilizar al Gobierno de Cuba de los severos daños provocados al pueblo cubano durante 65 años", señaló Rodríguez Parrilla.

El Departamento de Estado dijo el martes a Martí Noticias que las medidas reafirman el compromiso de EEUU con el pueblo cubano. "Creemos en la importancia de un acceso inclusivo, abierto y seguro a Internet para fomentar la prosperidad económica equitativa y facilitar el disfrute de los derechos humanos y las libertades fundamentales", subrayó la cancillería estadounidense.

En una conferencia de prensa, la subdirectora general de EEUU del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, Johana Tablada, mostró su insatisfacción con las regulaciones aprobadas por Washington.

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“No tocan el cuerpo del bloqueo ni tampoco modifican las medidas extremas y regulaciones que se aplicado por los gobiernos de Trump y Biden en los últimos años”, señaló. “Una vez más el gobierno de Estados Unidos trata de adecuar sus acciones no a la realidad de Cuba, sino a una ficción que se ha construido sobre la realidad de Cuba”.

Según un reporte de la web oficialista Cubadebate que cita las declaraciones de Tablada, la funcionaria dijo que el régimen de La Habana estudiará las medidas "y en caso de que ellas signifiquen una real apertura y no sea solamente un anuncio político", no obstacularizará su implementación.

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La diplomática recordó que Cuba permanece en la lista de países patrocinadores del terrorismo, una situación bajo la que, en su opinión, "resulta muy difícil" aplicar en todo su alcance las nuevas medidas anunciadas por el gobierno estadounidense.

El Departamento de Estado de EEUU retiró recientemente a Cuba de la lista de países que no cooperan plenamente con los esfuerzos antiterroristas de Estados Unidos. La cancillería estadounidense aclaró que este registro es independiente del de Estados Patrocinadores del Terrorismo, que implica sanciones económicas y financieras contra el régimen de La Habana. Cuba es el único país en esa lista negra con beneficios como los que garantizan las nuevas regulaciones.

Legisladores cubanoamericanos han criticado los cambios anunciados por la administración Biden en la política de EEUU hacia Cuba, y señalan con preocupación que las mismas allanan el camino para "sacar a Cuba de la lista de Estados Patrocinadores del Terrorismo". Mientras, organizaciones y figuras políticas estadounidenses pro levantamiento del embargo han celebrado su implementación, que consideran oportuna para ayudar a los cubanos dentro de la isla e impulsar el emergente sector privado.