Liberan bajo fianza al más joven de los hermanos Agosto, detenido en relación con las protestas de Nuevitas

Los hermanos Lázaro Alejandro Pérez Agosto (izq.) y Jimmy Johnson Agosto. (Foto: Facebook)

El joven Lázaro Alejandro Pérez Agosto, detenido en relación con las protestas antigubernamentales en Nuevitas, Camagüey, fue puesto en libertad bajo fianza el 3 de noviembre pasado, según informó su madre, Isabel Cristina Agosto, a Radio Televisión Martí.

Pérez Agosto está acusado de atentado. La Seguridad del Estado lo incriminó, a pesar de que no se encontraba en el pueblo cuando ocurrieron las manifestaciones de su localidad. Se encontraba en la Unidad Militar 4395, donde cumplía su Servicio Militar, según ha informado su madre.

“Quiero agradecer a cada amigo, a cada miembro de mi familia, a cada persona que se ha preocupado aún sin conocernos. A cada plataforma que hace posible que el caso de los hermanos Agosto sea conocido. Aún queda mucho por hacer en esta lucha”, expresó Isabel Cristina Agosto en Facebook.


Pérez Agosto, de 21 años, fue apresado por fuerzas combinadas de la Seguridad del Estado y la policía luego de que, el 8 de octubre, practicaran un registro en su vivienda. Fue llevado al cuartel provincial de la Seguridad del Estado, conocido como Villa María Luisa, en la capital provincial, hasta que fue liberado bajo fianza.

Un mes antes, su hermano Jimmy Johnson Agosto había sido arrestado y acusado de sabotaje por, supuestamente, lanzar piedras contra el cristal de una oficina estatal.

Al joven lo sacaron el 6 de septiembre de su casa, sin zapatos, ni camisa y sedado, después de regresar del hospital donde chequeaba su epilepsia.

Luego de 31 días detenido en la sede de la Seguridad del Estado de Camagüey, Jimmy fue uno de los jóvenes presentados por el régimen en la televisión estatal auto inculpándose, junto a otros manifestantes.

En el espacio Razones de Cuba, del Noticiero Nacional de Televisión, el vocero oficialista Humberto López acusó a los detenidos en Nuevitas de perpetrar actos terroristas pagados por grupos desde el exterior, con el propósito de deslegitimar las manifestaciones populares.

Ambos jóvenes viven en Gloria, una calle colindante con la barriada Pastelillo, el epicentro de las protestas de Nuevitas, en las que cientos de ciudadanos salieron a las calles a manifestarse contra los prolongados apagones y la gestión del gobierno de Miguel Díaz-Canel.