Curioso título para un libro, me dije, mientras buscaba libros para niños ucranianos con la intención de poderlos comentar en el podcast La Libertad es una Librería.
No busqué más, elegí este, todavía me pregunto qué mecanismo en mi mente me dijo que ese sería el libro, pues resulta muy difícil comentar un libro sin contenido de texto, sólo con imágenes para el coloreado. Quizás fue mi historia personal de niña, o después con mi hija -como lo explico en el podcast- la que me condujo a escogerlo.
Como ya dije en la grabación que ustedes oirán, la elección tuvo su origen en mi propia infancia. Bajo el comunismo la degradación moral y material llega muy pronto a los monumentos y al urbanismo, probablemente más de los que nos damos cuenta.
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Nacida en La Habana Vieja, fui testigo de cómo los edificios, monumentos, y sitios emblemáticos de la ciudad se fueron deteriorando debido a la desidia, el olvido, la falta de mantenimiento. Y yo misma, de niña, viví cuatro años en un cine, porque el albergue de la calle Montserrate donde nos habían ubicado a varias familias tras el derrumbe del inmueble donde residía, en la calle Muralla, se hizo insoportable debido al nivel tan alto de violencia y de carencias de todo tipo, pero esa es otra historia que he contado en disímiles oportunidades.
El hecho es que, en la memoria de un niño, devenido adulto luego, el comunismo hace estragos hasta en el patrimonio visual de su ciudad. Este libro para colorear Ucrania hubiera sido muy útil para los niños cubanos que adultos hemos sobrevivido al comunismo, porque hubiéramos podido colorear y reconstituir las ruinas de nuestro país, sin ser bombardeado más que por el odio de sus dirigentes, y lo hubiéramos conservado intacto en la memoria.
Para los niños ucranianos, cuyo país ha sido invadido y bombardeado con bombas reales, este libro será muy útil, sobre todo para los exiliados, pues podrán reconfigurar a través de la imaginación los espacios vividos que ya no existan, o que sean difícil de restaurar tras la post-guerra. Entre mapas, símbolos patrios, sitios bien definidos en la geografía de Ucrania, este sencillo libro de coloreado devuelve de forma ilusionada el país a los que lo han ido perdiendo.
Soy muy sensible a los niños en momentos tan crueles como estos, ¿quién no lo sería? Ofrecerles hoy este comentario en mi podcast, acerca de un libro que les está destinado para que regresen a su país a través del arte, de la pintura, del color, significa mucho para mí, que tan poco puedo brindar hoy desde mi propio exilio. Recíbanlo con todo mi amor y apoyo.