Llegan al puerto de La Habana buques de guerra rusos

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La fragata Almirante Gorshkov llega el lunes al puerto de La Habana (AFP).

Una flotilla de la marina de guerra rusa encabezada por la fragata Almirante Gorshkov llegó el lunes al puerto de La Habana, casi al mismo tiempo en que un avión de la Fuerza Aérea de Moscú aterrizaba en Caracas.

La fragata Gorshkov, en operaciones desde el año pasado, es una de las naves de guerra más modernas de la flota rusa. De acuerdo con la agencia Reuters, que a su vez cita al sitio de internet especializado en aviación Flightradar24, el IL-62M que llegó al Aeropuerto de Maiquetía es el mismo que ya estuvo en Venezuela en marzo y desató entonces las críticas de la Casa Blanca.

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Avión militar ruso en Aeropuerto de Maiquetía, Caracas

Ambas visitas ocurren el mismo día en que el viceministro de Relaciones Exteriores del Kremlin, Serguei Riabkov, dijo que el despliegue de misiles estadounidenses en el este de Europa, cerca de la frontera con Rusia, podría desatar una situación comparable a la llamada Crisis de los Misiles en 1962, cuando los gobiernos de Nikita Jrushóv y Fidel Castro pusieron al mundo al borde de una guerra nuclear.

Las Fuerzas Armadas de Cuba habían anticipado que, al entrar en la bahía de La Habana, la fragata rusa dispararía 21 salvas de saludo, que a su vez serían respondidas desde la Fortaleza de La Cabaña, reportó la Agencia EFE.

La fragata rusa Almirante Gorshkov atracó en el mismo muelle habanero donde fondeaban los cruceros procedentes de EEUU (Foto: AFP).

De acuerdo con la misma fuente, los marinos rusos harán una visita de cortesía al Jefe de la Marina de Guerra Revolucionaria (MGR) de Cuba, el contraalmirante Carlos Duque, y recorrerán “sitios de interés histórico y cultural” en La Habana.

La agencia oficialista rusa TASS reportó en diciembre que la fragata Almirante Gorshkov destruyó un blanco a 435 millas de distancia usando misiles Kalibr.

En febrero, el presidente Vladimir Putin dijo que su gobierno estaba listo para otra Crisis de los Misiles, y que si Estados Unidos desplegaba misiles de mediano alcance cerca de la frontera rusa con Europa, Moscú llevaría a aguas internacionales próximas a territorio estadounidense buques y submarinos armados con misiles supersónicos.