Cuba perdió anoche la posibilidad de brillar en la final del Clásico Mundial de Béisbol, cuando cayó ante Estados Unidos 2-14, en un juego marcado por las protestas de algunos asistentes que gritaban consignas y enarbolaban carteles contra la dictadura imperante en la isla.
En medio del fervor del partido, dos manifestantes se lanzaron al terreno, pero fueron rápidamente retirados por el equipo de seguridad del lugar. Fueron identificados por algunos medios y activistas en las redes sociales como el activista y artista plástico Danilo Maldonado "El Sexto", con un cartel que demandaba libertad para tres presos políticos del 11J, y el escritor y periodista Carlos Manuel Alvarez, con la bandera cubana en alto.
"Quise rescatar el gesto de Kaepernick delante de la banca del equipo nacional, pero en el corring todo se me mezcló. Un policía me preguntó por qué lo hice. Porque tengo amigos presos políticos, le dije. Y porque todos los presos políticos son mis amigos, añadí después, cuando lo pensé mejor. Libertad y justicia para Cuba, no podemos dejarnos caer", manifestó este lunes Alvarez en su cuenta de Facebook.
El team de EEUU arrasó a batazos contra la novena cubana, anulando la celebración que preparaba el gobierno de la isla, que en los últimos días había convertido en bandera política la clasificación del equipo nacional a las semifinales del torneo.
Frente al LoanDepot Park, un grupo de activistas en el exilio, al ritmo de tambores, gritaban también consignas contra el régimen de la isla, en una protesta organizada por varias organizaciones opositoras, agrupadas bajo la sombrilla de la Asamblea de la Resistencia Cubana.
No obstante la humillante derrota, como la calificó la agencia de prensa EFE, el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel felicitó en Twitter a su #TeamAsere, y los declaró tres veces victoriosos.
Mientras, en Miami, frente al estadio LoanDepot, donde se jugó la semifinal, los asistentes se retiraron satisfechos por la victoria de su equipo, que enfrentará el martes al ganador del choque de este lunes entre Japón y México.