Los periodistas despedidos de Hong Kong ven un camino oscuro e incierto por delante

Policías en Hong Kong empujan a periodistas en la manifestación anticomunista del 19 de enero de 2020. (Philip FONG / AFP).

Periodistas despedidos tras el cierre de varias organizaciones de noticias desde que el gobernante Partido Comunista Chino (PCCh) impuso una prohibición a la disidencia pública se enfrentan a un futuro incierto en medio de la disminución de la libertad de expresión en Hong Kong, dijeron comunicadores a Radio Asia Libre, RFA.

A Jik, ex periodista del ahora disuelto Stand News, denunció que nunca esperó que el sitio web de noticias cerrara, incluso después de que el periódico prodemocrático Apple Daily de Jimmy Lai se vio obligado a cerrar después de que sus activos fueran congelados en medio de una investigación sobre la opinión del periódico.

“Una vez que comienzan a arrestar a los editores, entonces comienzas a preocuparte por tu jefe y si eso también les sucederá a ellos tarde o temprano”, dijo A Jik.

El 29 de diciembre de 2021, sus peores temores finalmente se hicieron realidad, cuando más de 200 policías de seguridad nacional allanaron las oficinas de Stand News, incautaron más de 30 cajas de material y arrestaron a su ex editor en jefe Chung Pui-kuen y al editor en jefe interino Patrick Lam, así como la exdiputada a favor de la democracia Margaret Ng, la estrella de Cantopop Denise Ho, Chow Tat-chi y Christine Fang, quienes han formado parte de la junta directiva.

"Puedes imaginarlo 100 veces o más, pero el día que realmente sucede, cuando vas a la corte y ves a tus dos jefes en el banquillo, y el secretario de la corte lee los cargos uno por uno, diciendo cómo tu organización instigó esto o traicionó aquello, es un gran shock", dijo A Jik a RFA.

"Es posible que nunca hayas pensado en las cosas que estabas haciendo como un delito, hasta que alguien [te denuncia] y de repente de alguna manera violaste la ley y cometiste un delito muy grave".

Stand News cerró la misma noche que la redada, despidió a su personal y dejó a A Jik afuera, sin saber qué hacer a continuación.

Se ha centrado en reunirse con antiguos colegas, que van de excursión, acampan y escalan rocas juntos, en un intento por reorientarse en un mundo que ha cambiado por completo en tan solo unas pocas semanas.

“Al menos sé que hay otros en el mismo barco, sería desastroso si tuviera que pasar por esto sola”, agregó. "Estaría revolcándome en un mundo de dolor".

Ella dijo que a menudo se orientan de acuerdo con lo que sus amigos, colegas, políticos de la oposición y activistas de derechos humanos encarcelados querrían que hicieran.

"Cuando sabes que las personas que cumplen condena quieren que disfrutes de la vida, entonces tratas de hacer lo que dicen", dijo.

Pero se estremece al mirar demasiado de cerca los posibles futuros, ya que decenas de miles de jóvenes hongkoneses emigran en busca de una vida mejor, libres del control político del PCCh y la propaganda educativa.

"No creo que vuelva a encontrarme con un grupo de personas como esta; todavía tengo muchas ganas de trabajar con ellos", dijo.

Industria cinematográfica afectada

El productor de video independiente Sum Wan Wah, que solía trabajar regularmente para la serie documental Hong Kong Connection de RTHK, gran parte de la cual se eliminó debido a la represión de la emisora estatal, que ahora tiene que seguir la línea editorial del gobierno, dijo que se había dado cuenta de lo rápido que el espacio para el periodismo libre e independiente estaba desapareciendo cuando el cierre de Stand News fue seguido rápidamente por el de Citizen News a principios de 2022.

Sin el trabajo regular de plataformas bien financiadas como RTHK, Sum duda que pueda hacer documentales como autónomo, con una película de una hora que cuesta hasta 100.000 dólares de Hong Kong.

“Los costos de producción de documentales son bastante altos, y no se trata solo de recursos de producción, los periodistas también necesitan ganarse la vida”, dijo. "¿Podrán los periodistas encontrar a alguien para invertir, para que puedan seguir haciendo estas películas? ¿Y se atreven a seguir haciéndolas?".

Expresó que el éxodo en curso de la ciudad que fue provocado por la ley de seguridad nacional también está afectando a la industria.

"Cuando un grupo de personas con experiencia se va, tiene un impacto muy negativo en la realización de documentales", dijo Sum. "Cuando se tienen en cuenta todos estos problemas, las cosas no se ven nada bien: es difícil ver cómo es factible".

Para A Jik, hay consuelo en la idea de que el periodismo es, después de todo, el primer borrador de la historia.

"[Mi ex editor en jefe de Stand] una vez me dijo esto: 'Sabes, todo lo que escribiste, todo lo que estás escribiendo actualmente, todas esas historias que reportaste, es historia futura. Es un registro muy importante. Tal vez su valor no se verá hasta dentro de 30 ó 40 años, pero la gente lo verá cuando vuelva a leer esas cosas'".

Lema en el Tower Bridge

Mark Clifford, exdirector independiente no ejecutivo del ahora disuelto imperio Next Media de Lai, también mostró una imagen en su cuenta personal de Twitter que muestra una proyección de una foto de Lai levantando su puño derecho, rodeado de periodistas.

La instalación fue obra del artista Robin Bell antes de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022 en Beijing, y también presentaba los anillos olímpicos dibujados con alambre de púas, en referencia al encarcelamiento masivo de uigures y otros grupos minoritarios en Xinjiang por parte de China, así como a los abusos contra los derechos, apuntando a tibetanos, disidentes y manifestantes de Hong Kong.

La exhibición se produjo después de que una coalición de grupos cristianos pidiera el lunes a la líder de Hong Kong que retirara los cargos contra Jimmy Lai y otros activistas políticos actualmente tras las rejas en virtud de una ley de seguridad nacional draconiana.

El sacerdote católico Franco Mella pidió a la directora ejecutiva Carrie Lam, que es una católica devota, que presione al gobernante Partido Comunista en Beijing para obtener una amnistía.

“Esperemos que dé una respuesta a la voz de su conciencia como católica”, dijo Mella a los periodistas.

El sacerdote anglicano y exlegislador Fung Chi Wood agregó: "Espero que se escuchen más voces sobre la posibilidad de una amnistía para ellos".

El reverendo Alan Smith de St. Albans en el Reino Unido y el ex arzobispo de Armagh en Irlanda, Lord Eames, también agregaron sus nombres al pedido de amnistía, y Mella pidió que el Papa sumara su voz.

(Traducido y editado por Luisetta Mudie al inglés, por Radio Martí al español)