Luis Robles sigue sin atención médica; autoridades del penal incumplen lo acordado, denuncia su madre

Yindra Elizástigui junto a un cartel por la libertad de su hijo, Luis Robles Elizástigui. (Fotos: Facebook)

El preso político Luis Robles Elizástigui continúa sin recibir atención médica en la cárcel Combinado del Este, en La Habana, donde hace solo una semana las autoridades se comprometieron con su familia en atenderlo debidamente.

Así lo denunció este miércoles a Radio Martí su madre, Yindra Elizástigui, quien lo pudo visitar el martes.

"Allí hubo un compromiso, que se le iba a dar la atención, compromiso este que no se ha cumplido, y ayer él me dice que todavía no lo han llevado a ver a los especialistas", señaló la mujer.

Según la madre del preso político, cuando se dirigió a la oficina de Atención a la Ciudadanía, en el penal, la enfermera del lugar le aseguró que su hijo sería remitido al oftalmólogo, porque "está presentando problemas de visión, y le están dando unos dolores de cabeza muy intensos, aparte de las otras patologías que tiene".

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Declaraciones de Yindra Elizastigui, madre de Robles

Robles Elizástigui quien fue detenido en diciembre de 2020 por manifestarse pacíficamente con un cartel en el Boulevard San Rafael, en la Habana, permanece en el edificio 2 de la prisión Combinado del Este, donde además de no ser atendido por un médico, según su madre, no se le permite el acceso a medicamentos que su familia le lleva para aliviar sus padecimientos, por falta de autorización.

"No los dejaron pasar porque, según ellos, estos medicamentos tenía que aprobarlos la enfermera del piso donde se encuentra", dijo.

El joven preso político presenta un marcado deterioro físico, señaló su madre, quien, asegura, pedirá una entrevista con la dirección del penal.

"Me dice, 'mamá, yo he rebajado alrededor de siete kilos'. Es una diferencia... Yo vi a mi hijo ayer delgado, delgado, en comparación con la visita anterior", subrayó la mujer.

Luis Robles Elizástigui cumple una condena de cinco años de privación de libertad por protestar en diciembre de 2020, en el Boulevard San Rafael, en La Habana, portando un cartel donde exigía libertad para Cuba y para el rapero contestatario Denis Solís, encarcelado en ese momento. Los delitos, según la fiscalía, fueron resistencia y propaganda enemiga.