En La Habana una madre y sus cuatro hijos están a punto de quedar en la calle

Anyell Valdés Cruz y dos de sus hijos. Foto Cortesía José Díaz Silva.

En 2015 Anyell Valdés ocupó un local de materias primas de los CDR y ha recibido la amenaza de desalojo para este viernes.

Anyell Valdés Cruz, una madre soltera, y sus cuatro hijos ocupan un local abandonado por el gobierno desde hace 2 años y tres meses y han sido notificados de que este viernes serán desalojados por la fuerza, según explicó ella misma a Radio Martí.

Valdés Cruz, de 37 años de edad, dijo que el local en donde se metió con sus hijos en diciembre de 2015 estaba abandonado y había servido de almacén de recogida materias primas para una de las circunscripciones de los Comité de Defensa de la Revolución (CDR) en el municipio Boyeros, La Habana.

“Tuve la necesidad de introducirme en un local que estaba en malas condiciones, pero estaba mejor que lo que yo tenía un cuarto de madera al lado del río, con todas las pudriciones al lado. Estoy albergada desde el año ’87, nadie me resuelve nada y entonces hice eso para la mejoría de mis hijos”, señaló.

Esta madre soltera dijo que hace solo unas semanas “vinieron unos muchachos midiendo (el terreno) para una cafetería particular”, y que lo hicieron estando ella presente sin ofrecer más explicaciones.

Valdés, que teme ser desalojada por la fuerza, aseguró que desde ayer ha colgado un cartel frente a la vivienda que reza: “¡Tengo cuatro hijos. Soy una madre que sufre porque me quieren desalojar. No al desalojo!”.

Los hijos de Valdés Cruz son Ivette Blanco Valdés, de 16 años y estudiante de segundo años de Defectología en la Escuela Pedagógica “Salvador Allende”; Richard Pedro Valdés, 7 años, y los gemelos Ronald y Talía Ferrer Valdés, de 2 años y tres meses.

La mujer añadió que en la semana en que ocupó el lugar solo el coordinador de los CDR, Miguel Carcines Armas, se presentó ante ella a decirle que llamaría a todos los lugares pertinentes porque "tenía que salir de ahí”.

Anyell Valdés relató este jueves que el pasado 19 de marzo se plantó en la Plaza de la Revolución ante las oficinas del Consejo de Estado a protestar.

“Entonces ahí me llamaron cinco patrulleros, me llevaron a la de ‘menoría’ (Oficial de Prevención de Menores), la CI (Contrainteligencia) porque vieron que los niños son hijos de Roberto Ferrer Gener –un defensor de los Derechos Humanos”, indicó y según dijo buscaba que “un pez grande de arriba” la atendiera.

Según dijo en la entrevista fue llevada a varias instancias de gobierno como el Consejo de la Administración Municipal (CAM) y Atención a la Ciudadanía con la promesa de atenderla al día siguiente, pero solo recibió la confirmación de que “tenía hasta este viernes para abandonar el lugar”.

En comunicación con el opositor José Díaz Silva, éste confirmó que el local, donde se instaló la zona del CDR para almacenar la recogida de materias primas: botellas de vidrio, cartón y papel, pertenecía a una familia que emigró a los Estados Unidos.

A la construcción de mampostería, explicó, ella misma se ocupó de hacerle algunos arreglos: “ya yo le puse la corriente, le puse el agua, hice una cocina, tiene baño… y estaba abandonado”.

Anyell Valdés Cruz reside en Calle Morales s/n Esquina Finlay y Cisneros Betancourt, Los Pinos, Boyeros, La Habana.