Las recientes declaraciones del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba (MINREX) sobre el caso de la periodista Karla Pérez fueron rechazadas por Human Rights Watch y el periodista de Tremenda Nota, Maykel González Vivero.
“Al falta de argumentos, el régimen cubano se dedica a atacar a Human Rights Watch (HRW) y el Comité para la Protección de los Periodistas”, declaró José Miguel Vivanco, director de las Américas de HRW.
“No, señora, no somos ‘pseudo-organizaciones’ que hacemos actos ‘subversivos’”, dijo Vivanco sobre las declaraciones hechas por la vocera de la Cancillería, Yaira Jiménez Roig.
“Denunciamos las violaciones sistemáticas de derechos humanos que comete su gobierno”, aseveró el representante de HRW.
Por su parte, González Vivero lamentó que el MINREX tenga que "editar, mentir y calumniar para justificar ante la opinión pública la decisión inadmisible de negar a Karla su derecho a volver a Cuba”.
Jiménez Roig publicó en Twitter “una transcripción inexacta e incompleta de mi conversación de esta tarde con el embajador Giraldo Mazola”, dijo González Vivero en Facebook.
“No esperaba esa llamada. Me di por respondido con la conferencia de prensa de este viernes, donde Jiménez Roig me calificó de personero y dijo, por la tangente, ante la pregunta de una periodista, que Karla Pérez González no podrá volver a Cuba”, precisó el periodista.
A las 7:40 pm recibió la llamada de Mazola para dar respuesta formal al reclamo que presentó el 18 de marzo en el MINREX. “Le agradecí por llamar. Como ya me daba por respondido, no pensé referirme en público a esa llamada para desmentir cualquier impresión de show mediático".
Posteriormente, Jiménez Roig publicó su hilo de tweets. “Sus declaraciones, que intentan desprestigiarme otra vez, me obligan a responder. Lo hago, para que se entienda mejor y no haya ambigüedad, en varios puntos”, sostuvo el comunicador independiente:
1. Estas no fueron las palabras exactas de Mazola. No se trata de una transcripción literal.
2. La vocera omite lo que dije a Mazola. No hay modo de ser creíble omitiendo a la otra parte.
3. Le expliqué a Mazola que no tuve intención de hacer ninguna provocación y que no la hubo. Porque Mazola sí habló de "una provocación contra Cuba", un pasaje que no aparece en los tweets de Jiménez Roig.
4. Le repetí a Mazola que no tergiversé sus palabras. También hablo de "tergiversación". Y que, por el contrario, salí satisfecho de su atención en la Cancillería. Lo hice público en aquel momento.
5. Le agradecí por llamarme, explicándole que no lo esperaba y que me había dado por respondido en la conferencia de prensa donde me insultaron llamándome "personero", negándome la condición de periodista y atribuyéndome subordinación a la agenda estadounidense.
6. Le aseguré a Mazola que respeto mucho mi oficio para tergiversar nada y que, además de periodista, me considero una persona decente. Si transmitimos, le expliqué, fue por cumplir con la audiencia interesada en la situación de Karla, no por morbo, y la transmisión se hizo con veracidad, en tono adecuado. Responsablemente. Mazola observó que no me identifiqué como periodista. Parece que no me escuchó. Fue lo primero que le dije. También le informé que eran periodistas los que esperaban afuera.
7. Dejé claro que Tremenda Nota no participa en un plan mediático organizado desde el extranjero ni favorece a ninguna de las facciones políticas que actúan en Cuba. Añadí que yo, en particular, no apruebo la política estadounidense hacia Cuba y que eso es notorio.
8. Le señalé a Mazola, por último, que lo más lamentable de la conferencia no fueron los insultos y falsedades que nos dedicaron, a la revista y a mí, sino saber que Karla Pérez González, una colega, una cubana, no podrá volver a su país.
“Sinceramente lamento que el MINREX no haya estado a la altura de su condición institucional y que tenga que editar, mentir y calumniar para justificar ante la opinión pública la decisión inadmisible de negar a Karla su derecho a volver a Cuba”, subrayó el periodista.
“Es penoso”, añadió, que la Cancillería use a Giraldo Mazola “para una jugada tan desleal contra una ciudadana que quiere regresar a su país y contra otro ciudadano que solicitó una posición oficial sobre el caso. Al cabo de todo esto, sigo pensando en qué podemos hacer para que Karla vuelva”.