La oposición uruguaya quiere que el presidente José Mujica discuta con la disidencia cubana la situación de los derechos humanos en el país, aprovechando su próximo viaje a La Habana.
La oposición uruguaya ha pedido al presidente José Mujica que reciba a los disidentes cubanos durante el viaje que realizará a La Habana, el 27 de este mes, para participar en la cumbre de la Comunidad de Estados de Latinoamérica y el Caribe (Celac).
Según el periódico uruguayo elpais.com, tras conocerse la visita de Mujica a Cuba, se desató un debate en el Senado sobre los derechos humanos en la isla y se pidió al mandatario que haga contacto con la disidencia cubana para conocer cómo les va.
El senador uruguayo Ope Pasquet dijo que Cuba vive una "grave situación" de derechos humanos, y mencionó las restricciones a la libertad de expresión, las detenciones de periodistas y activistas por los derechos humanos.
Pasquet citó informes de Amnistía Internacional y Human Rights Watch que muestran claramente las violaciones a los derechos humanos en Cuba.
"Es una hipocresía asistir a un país donde todos sabemos lo que está pasando y nadie dice nada", manifestó.
Según el político en este momento ir a Cuba es "cohonestar una situación" sobre violaciones a los derechos humanos.
Entretanto, el senador oficialista Carlos Baraibar restó importancia al asunto, porque "Cuba está operando como sede de la reunión (…) los que van no van a discutir la situación de Cuba sino sobre la agenda del encuentro, es decir sobre la lucha contra el hambre y la pobreza".
A pesar del debate sobre Cuba, la propuesta no fue debatida, "porque el presidente del Senado, Danilo Astori, aclaró que no se podía agregar un asunto en una sesión extraordinaria, como lo dice el reglamento del Senado".
En julio pasado, el disidente cubano Manuel Cuesta Morúa (partido Arco Progresista), con motivo del viaje a la isla de Mujica por el 60 aniversario del asalto al cuartel Moncada había expresado su deseo de conversar con el mandatario sobre la "rica experiencia democrática del Frente Amplio" y la alternancia en el gobierno de los partidos políticos en Uruguay.
Según el periódico uruguayo elpais.com, tras conocerse la visita de Mujica a Cuba, se desató un debate en el Senado sobre los derechos humanos en la isla y se pidió al mandatario que haga contacto con la disidencia cubana para conocer cómo les va.
El senador uruguayo Ope Pasquet dijo que Cuba vive una "grave situación" de derechos humanos, y mencionó las restricciones a la libertad de expresión, las detenciones de periodistas y activistas por los derechos humanos.
Pasquet citó informes de Amnistía Internacional y Human Rights Watch que muestran claramente las violaciones a los derechos humanos en Cuba.
"Es una hipocresía asistir a un país donde todos sabemos lo que está pasando y nadie dice nada", manifestó.
Según el político en este momento ir a Cuba es "cohonestar una situación" sobre violaciones a los derechos humanos.
Entretanto, el senador oficialista Carlos Baraibar restó importancia al asunto, porque "Cuba está operando como sede de la reunión (…) los que van no van a discutir la situación de Cuba sino sobre la agenda del encuentro, es decir sobre la lucha contra el hambre y la pobreza".
A pesar del debate sobre Cuba, la propuesta no fue debatida, "porque el presidente del Senado, Danilo Astori, aclaró que no se podía agregar un asunto en una sesión extraordinaria, como lo dice el reglamento del Senado".
En julio pasado, el disidente cubano Manuel Cuesta Morúa (partido Arco Progresista), con motivo del viaje a la isla de Mujica por el 60 aniversario del asalto al cuartel Moncada había expresado su deseo de conversar con el mandatario sobre la "rica experiencia democrática del Frente Amplio" y la alternancia en el gobierno de los partidos políticos en Uruguay.