Un total de 35 menores, que participaron en las protestas de julio de 2021 aún cumplen sus sentencias en penales cubanos, la mayoría en La Habana.
Fueron acusados de conductas vandálicas y de actuar “con el deliberado propósito de subvertir el orden constitucional del Estado socialista”.
A pocas horas del 2º aniversario de las históricas protestas, las madres de tres de los muchachos privados de libertad reiteraron a Martí Noticias su opinión de que las autoridades cubanas emitieron sanciones excesivas contra los manifestantes.
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“Tienen que darse cuenta de que ahí (en las protestas) nadie cometió un delito, todo el mundo lo que quiere es un cambio, y eso fue lo que ellos pidieron. Esto, cada día, está peor, dijo Yudinela Castro, madre de Rowland Castillo, quien cumple 5 años de prisión por el delito de sedición.
“A mi hijo, la libertad condicional, que ya le toca, se la denegaron. Tiene que esperar 6 meses más. A él solo no, a todos los menores se la denegaron”, afirmó.
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Reportaje de Yolanda Huerga
Los presos que no hayan arribado a los 20 años de edad al comenzar a cumplir la condena tienen derecho a ser excarcelados cuando hayan extinguido dos tercios de la sanción, según establece la Ley de Ejecución Penal vigente.
Pero abogados independientes consideran que ningún cubano preso por razones políticas recibirá un beneficio si antes no lo determina la Seguridad del Estado.
En sus expedientes, los recluidos por algún tipo de disidencia están señalados con las iniciales "CR" (contrarrevolucionarios).
Lee también A dos años del 11J Cuba mantiene en prisión a 661 de los manifestantes: todos "son torturados sin piedad"De acuerdo a las investigaciones de la organización Cuban Prisoners Defenders, algunos de los menores privados de libertad se encuentran en sus casas bajo diferentes medidas que limitan su libertad y obligados a trabajar en lugares asignados por las autoridades.
Es el caso de Lázaro Noel Urgellés Fajardo, sentenciado por “sedición” y “hurto” a 5 años de privación de libertad subsidiada con trabajos sin internamiento.
“Lo que hizo fue manifestarse porque era lo que él sentía: Cuba tiene hambre, los jóvenes no tienen futuro, no tienen diversión, no tienen ropa, no tienen nada, por eso, todos se quieren ir”, dijo Mailyn Fajardo, su madre.
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“Once J Cuba”, un despertar de la sociedad cubana
La abogada Laritza Diversent, del centro de asesoramiento legal Cubalex, ha advertido que “nada alentador” puede esperar a estos niños en centros penitenciarios bajo la administración militar del Ministerio del Interior (Minint).
“Los guardias que trabajan en la prisión, no están preparados”, agregó Kenia Miranda Cárdenas, la mamá de Kendris Miranda Cárdenas, sancionado a 6 años de internamiento por “sedición”.
“Eso [la prisión] para nadie ayuda, lo contrario, al estar ahí se van poniendo peor porque hay todo tipo de gente y en esos lugares se te pega más lo malo que lo bueno. Ahí hay todo tipo de cosas y te puedes buscar un problema de la noche a la mañana”, indicó.
En un informe presentado al Comité de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas, Cuba reconoció 39 menores de edad, de entre 16 y 19 años, condenados a privación de libertad por las protestas de julio de 2021.