Más de 500 médicos y casi 40 enfermeros cubanos que emigraron a España lograron la homologación de sus títulos e incorporarse al sistema de salud del país europeo, durante 2021.
Procedentes de Cuba se incorporaron 564 facultativos y 39 especialistas en Enfermería, según la compilación de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), citada por la revista Redacción Médica.
“Con el aumento de los últimos años del número de cubanos que emigran por la situación que se vive dentro de la Isla y los que huyen de la dictadura, entre ellos están los médicos y uno de los destinos que eligen es España por algunas facilidades que da en el proceso de homologación o revalidación a los médicos extranjeros de todo el mundo”, indicó el doctor Nelson Gandulla, cienfueguero de nacimiento radicado en Madrid.
Muchos de los profesionales de la salud de la Isla que llegan a España han escapado de las “misiones internacionalistas” cubanas por lo que la legalización de documentos podría tardar mucho más, debido a las restricciones que impone el Gobierno cubano.
“A veces se dificulta el proceso debido a que es un poco engorroso para los profesionales cubanos sacar toda la documentación que les piden aquí para poder homologar y el régimen muchas veces retiene esos papeles o simplemente a muchas personas no se los dan”, explicó.
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Reportaje de Yolanda Huerga
“El tiempo que demora en obtenerse la revalidación puede tardar en el caso de los médicos de 10 meses a 14 meses y otros profesionales como la enfermera o enfermero, les puede tardar hasta unos 24 meses si todo está bien y si no le ponen ningún requerimiento. Si está revalidando una especialidad puede tardar años”, apuntó Gandulla.
Además de la homologación del título, para ejercer en España dentro del sistema de salud es necesario tener estatus de residente con autorización para trabajo.
El volumen de médicos extranjeros que se ha establecido en España creció a 4.293 en 2021, un 6,3% en comparación con el año anterior cuando la cifra se cerró en los 4.036.
Muchos doctores y otros especialistas de salud denuncian "las condiciones de esclavitud" a la que son sometidos en las “misiones”. Entre tanto, La Habana insiste en que sus "misiones médicas" son muestra de la "vocación humanista” de la Revolución.