El Observatorio Cubano de Derechos Humanos (OCDH) solicitó este miércoles a la Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de Naciones Unidas que abogue ante las autoridades cubanas por la liberación de los presos políticos y la protección de las mujeres ante el auge en la isla de los feminicidios.
El director de Estrategia de esa organización, Yaxis Cires, explicó a Radio Martí que durante los últimos días, integrantes del OCDH junto a otros activistas, como la periodista independiente Iliana Hernández, han estado concientizando a los representantes del sistema de Derechos Humanos de la ONU, en Ginebra, sobre la "grave situación de los presos políticos" y el "estado de salud de muchos de ellos".
Cires mencionó la represión desatada por las autoridades cubanas contra un grupo de presas políticas y sus familiares tras la publicación de una carta que firman con su sangre en la cárcel de mujeres del Guatao. En la misiva, las mujeres exigen al dictador Miguel Díaz-Canel que cumpla el deseo del papa Francisco de que los manifestantes del 11 de julio de 2021 sean liberados.
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"Hemos pedido que se condene esa situación y que se exija la libertad inmediata de todas las presas y presos políticos cubanos", recalcó el representante del OCDH.
Un comunicado publicado este jueves por la organización señala que en varios encuentros con diferentes mandatos del sistema de derechos humanos de la ONU, en Ginebra, el OCDH ha denunciado el clima de violencia política en la isla. También se exigieron que “se escuchen los reclamos de los colectivos feministas y del activismo social, que demandan mayor protección a las mujeres ante la violencia machista y política”.
Lee también A corte disciplinaria presas políticas del 11J que firmaron carta con su sangreOtra violación reiterada de derechos humanos que el OCDH denunció en Ginebra es la de los activistas con prohibición de regresar a Cuba, como es el caso de Omara Ruiz Urquiola, dijo Cires.
"En el día de hoy (9 de marzo) hemos procedido a presentar ante los mecanismos (del sistema de derechos humanos de ONU) una denuncia formal sobre la violencia contra la mujer en Cuba".
Esta denuncia formal incluye, según Cires, tanto la omisión del tema de los feminicidios por parte del Estado cubano, "y no corresponder a las exigencias de los grupos feministas y de la sociedad civil" que están pidiendo la aprobación de una Ley Integral contra la violencia de género, como la violencia "provocada, dirigida, ordenada desde el Estado cubano contra las más de 100 presas políticas" y contra las mujeres activistas, que en los últimos años se han enfrentado a "constantes actos represivos" como detenciones arbitrarias, citaciones policiales e impedimentos de salida de su vivienda.
También hablaron sobre la situación de "empobrecimiento y de hambruna que hay en el país".
Según explicó Cires, en cada reunión con los representantes de la ONU han apelado a que "haya una mayor conciencia, una mayor denuncia, sobre la situación tan grave en lo político, en lo económico y en lo social, que está viviendo el país, y que no es un momento para ser indiferente ante lo que está ocurriendo", concluyó.