Ocho cubanas, víctimas de una red de trata de personas, fueron rescatadas por las autoridades del condado Hillsborough, en Florida, y dos sospechosos están tras las rejas por obligarlas a prostituirse, como pago de la "deuda" que contrajeron con sus captores al ser traídas a Estados Unidos a través de la frontera con México.
La Oficina del Sheriff del Condado Hillsborough (HCSO) dijo este lunes que el rescate fue posible gracias a un aviso recibido la semana pasada acerca de un posible caso de trata de personas.
"El aviso sugirió que una víctima fue obligada a realizar actos sexuales comerciales para pagar una "deuda" de $60 mil dólares por haber sido traída a los Estados Unidos desde Cuba", informó la HCSO en un comunicado.
The Hillsborough County Sheriff%27s Office has rescued eight victims from the perils of human trafficking, while two suspects are behind bars for coercing them into commercial sex acts. View the full press release here: https://t.co/UEmNlqPU3H pic.twitter.com/tcd1ogK9SM
— HCSO (@HCSOSheriff) October 24, 2022
Otro mensaje, recibido por la Línea Directa Nacional contra la Trata de Personas, alertó a las autoridades de que Amet Ramón Maqueira De La Cal, de 35 años, y Rosalía Leonard García, de 29, confiscaron documentos y teléfonos celulares a varias mujeres traídas a EEUU desde Cuba. Luego, las víctimas fueron separadas entre dos apartamentos y se les pidió que pagaran la comida y el alquiler, detalla la nota.
Tras los avisos, el 19 de octubre, detectives de la HCSO comenzaron a realizar vigilancia encubierta en los dos apartamentos, y corroboraron la presencia intermitente en el lugar de los dos sospechosos. Luego las víctimas fueron conducidas a dos lugares por separado; primero, a un club de caballeros local, y luego, a un establecimiento de juego.
Según el comunicado, los detectives se enteraron de que las cubanas fueron obligadas a trabajar en varios clubes en los condados de Hillsborough y Pinellas para pagar su "deuda de viaje", por haber sido traídas a Estados Unidos desde Cuba. "También fueron obligadas a realizar actos sexuales comerciales a través de la prostitución", añade la nota.
A medida que avanzó la investigación, los detectives encontraron que algunas de las víctimas aparecían en anuncios en sitios de acompañantes en línea. Precisamente, mediante el contacto con una de ellas durante una salida del grupo a un centro comercial, los agentes corroboraron que todas las mujeres que viajaban en el vehículo, excepto Leonard García, eran víctimas de trata de personas.
"Se autorizó y ejecutó una orden de registro residencial en los apartamentos. Allí, los detectives localizaron dinero en efectivo, condones, un arma de fuego robada y diferentes formas de identificación. Se cree que el arma de fuego se utilizó como táctica de intimidación, para obligar a las mujeres a realizar actos sexuales comerciales. También se utilizó para asustarlas y amenazar a las familias de las víctimas", señaló la HCSO.
Tras el registro, los agentes rescataron a las ocho mujeres.
Selah Freedom, una organización sin fines de lucro contra la trata de personas, proporcionó a las víctimas un lugar seguro donde permanecer durante una semana, y coordinó otros recursos para ayudarlas.
"No tengo ninguna duda de que si la Sección de Trata de Personas de la Oficina del Sheriff del Condado de Hillsborough no hubiera intervenido cuando lo hizo, este negocio atroz habría continuado, crecido y podría haber llevado a la muerte de una de las ocho mujeres rescatadas", dijo en una conferencia de prensa este lunes el sheriff Chad Chronister.
A los sospechosos, añadió, solo les importaba ganar dinero a costa de la explotación de personas inocentes, por lo que las cubanas "se vieron obligadas a vivir en condiciones de vida y de trabajo deplorables".
Cuba vive una ola migratoria que ha llevado a cientos de miles de sus ciudadanos a emprender una travesía a través de Centroamérica hacia los puntos fronterizos de México con EEUU. En 12 meses, la cifra de cubanos que utilizado esta vía para emigrar a roto todos los récords históricos, con el arribo de 224.607 personas procedentes de la isla, según datos del Departamento de Aduanas y Protección de Fronteriza de Estados Unidos.