Luego de alcanzar cifras récord el año pasado, el paso de migrantes por la peligrosa selva del Darién, que sirve de barrera natural entre Panamá y Colombia, se redujo en un 35% interanual en los primeros nueve meses de 2024, dijo el jueves una autoridad del istmo citando cifras oficiales.
Las autoridades panameñas atribuyen la caída a las medidas de seguridad más estrictas implementadas por el gobierno del presidente José Raúl Mulino, que asumió el 1 de julio, y que incluyen, entre otras, el cierre de tramos del Darién con alambre de púas y repatriaciones con apoyo de Estados Unidos.
Entre enero y el 25 de septiembre, 259.712 migrantes llegaron a Panamá a través del Darién, un 35% menos en comparación con el mismo lapso del año pasado, informó el jefe de la Brigada Oriental del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), Alexis De Gracia.
El 68% de aquellos migrantes proviene de Venezuela.
Panamá se ha convertido en una ruta de paso para decenas de miles de migrantes que, en su mayoría, buscan llegar a Estados Unidos. El año pasado, un récord de más de 520.000 migrantes -la mayoría de ellos venezolanos- cruzaron el Darién en busca de mejores oportunidades en el norte.
En julio, el primer mes de Mulino en la presidencia, 20.519 migrantes cruzaron el Darién, un 34% menos desde junio y menos de la mitad de los que atravesaron la zona en el mismo mes del año pasado. En agosto hubo 19% menos cruces respecto al mes previo y cinco veces menos en comparación con el mismo mes de 2023.
A pesar de ello, los analistas creen que es poco probable que las medidas implementadas por el gobierno de Mulino tengan éxito en el mediano plazo porque no combaten las causas fundamentales de migración y, por el contrario, podrían hacer que los viajes sean aún más peligrosos.
De Gracia no confirmó si el flujo de migrantes a través del Darién se habría reducido por la activación de otras rutas migratorias desde Colombia a través del Caribe.
"Existe la posibilidad de que usen otras rutas, se habla de la isla de San Andrés", dijo la autoridad. "La migración también es una situación aprovechada por delincuentes que buscan la manera de vulnerar las vías de acceso correcto", agregó.