Los gobiernos de Países Bajos y República Checa denunciaron este viernes las violaciones de derechos humanos en Cuba, después del asalto policial a la sede del Movimiento San Isidro, en La Habana.
La primera voz de alarma la extendió Bahia Tahzib-Lie, ministra de Relaciones Exteriores de Países Bajos, quien mostró su "preocupación" por los huelguistas de San Isidro.
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Países Bajos y República Checa denuncian represión en San Isidro
"El Ministerio de Relaciones Exteriores de Países Bajos está preocupado por la situación de derechos humanos en Cuba e insta al gobierno cubano a defender la letra y el espíritu de la Declaración Universal de los Derechos Humanos, mostrar respeto por la libertad de expresión y abstenerse de practicar arrestos y detenciones arbitrarias", escribió la canciller neerlandesa en Twitter.
Además, etiquetó los términos #pressfreedom #safetyofjournalists.
Por su parte, Tomáš Petříček, canciller de la República Checa, dijo en la misma red social estar "profundamente preocupado por la reciente ola represiva contra el Movimiento San Isidro en Cuba".
Petříček instó a las autoridades cubanas "a respetar plenamente los derechos humanos de todos los ciudadanos".
"Hemos realizado gestiones públicas y privadas con la Unión Europea, abarcando el mayor número de actores políticos posibles, y un ejemplo es el pronunciamiento de la Subcomisión de Derechos Humanos del Parlamento Europeo", afirmó Yaxys Cires, director de Estrategia del Observatorio Cubano de Derechos Humanos.
Sin embargo, no pasa desapercibido que Países Bajos y República Checa sean los primeros gobiernos en reaccionar, mientras España, el país que suele liderar las iniciativas europeas sobre Cuba y América Latina, permanece en silencio.
"En cuanto al gobierno de España, confiamos en que en las próximas horas haya un pronunciamiento, como mínimo del Partido Socialista Obrero Español", estimó Cires.
Esta semana, Radio Televisión Martí cursó cinco solicitudes de opinión a la cancillería española, sin que hubiera respuesta alguna sobre el tema.
No obstante, según Javier Larrondo, presidente de Cuban Prisoners Defenders, estamos ante el regreso de Europa al tema cubano.
"La reacción solidaria, en cadena, que se está dando en Europa, apoyando al Movimiento San Isidro y arrinconando al régimen y su represión, no la hemos visto en muchísimos años", opinó Larrondo.
El jueves, la Subcomisión de Derechos Humanos del Parlamento Europeo había pedido "encarecidamente" al régimen de La Habana "entablar un diálogo urgente" para "liberar" al músico Denis Solís González y "aliviar" la situación de los huelguistas.