El vicepresidente estadounidense, Mike Pence, afirmó el martes que Donald Trump debe aprobar "pronto" las nuevas sanciones contra Rusia, que desde hace una semana son objeto de una escalada entre los dos países.
"El presidente Trump firmará pronto el texto sobre las sanciones", declaró Pence en un visita a Tiflis, capital de Georgia, país que ambiciona incorporarse a la OTAN y la Unión Europea.
Las nuevas sanciones económicas fueron votadas por la casi totalidad de las dos cámaras del Congreso estadounidense la semana pasada. Rusia respondió imponiendo una reducción drástica del personal que trabaja en las legaciones diplomáticas estadounidenses en su territorio.
.@VP Pence: EE.UU. continuará trabajando con Georgia para reducir vulnerabilidades y contrarrestar la agresión de Rusia. #VPinEurope pic.twitter.com/BqVdCAIzIL
— USA en Español (@USAenEspanol) August 1, 2017
Pence denunció además la "ocupación" de una parte del territorio georgiano por Rusia, luego de una guerra que opuso a los dos vecinos en el verano de 2008.
El vicepresidente reiteró el apoyo de EEUU a esta exrepública soviética que calificó como "socio estratégico clave" de Estados Unidos en la región.
Una corta guerra entre Georgia y Rusia en agosto de 2008 terminó con el reconocimiento de Moscú a la independencia de dos repúblicas separatistas, Osetia del Sur y Abjazia.
Luego de su visita a Georgia, Pence viajará a Montenegro, que ingresó a la OTAN el 5 de junio, última etapa de su gira que comenzó en los países Bálticos.
EEUU comienza a reducir dotación en Rusia
Estados Unidos empezó a retirar muebles y equipamiento desde una propiedad diplomática en Moscú el martes, en la primera señal de cumplimiento con una orden del Kremlin para reducir su presencia en Rusia en represalia por las nuevas sanciones impuestas por Washington.
El presidente ruso, Vladimir Putin ordenó que Estados Unidos reduzca en alrededor de un 60 por ciento su personal diplomático en Rusia al 1 de septiembre y afirmó que Moscú requisará dos propiedades diplomáticas estadounidenses en respuesta a las sanciones aprobadas por el Congreso la semana pasada.
El martes, personal de mudanza empezó a desmantelar equipamientos de juegos y barbacoas en una dacha (villa campestre) de propiedad de Estados Unidos en las afueras de Moscú después de que se les rehusó la entrada el día anterior, según un periodista de Reuters en el lugar.
La dacha, que está siendo confiscada junto a una bodega estadounidense en el sur de la capital rusa, era usada por personal diplomático estadounidense los fines de semana para realizar fiestas para estudiantes, periodistas y otros diplomáticos.
El domingo, Putin dijo que Rusia ordenó que Estados Unidos retire a 755 de sus 1.200 empleados diplomáticos en su embajada y en operaciones consulares, aunque muchos de los exonerados serán ciudadanos rusos, pues Estados Unidos puede elegir a quién va a sacar de sus puestos de trabajo.
(Con información de AFP y Reuters)