La elección tuvo lugar el viernes en la Asamblea General número 51 de ODEPA, la Organización Deportiva Panamericana, reunida en Toronto, Canadá.
Lima derrotó a sus rivales Santiago de Chile, La Punta en Argentina y Ciudad Bolívar en Venezuela para obtener los derechos a organizar los Juegos Panamericanos del año 2019. La elección tuvo lugar el viernes en la Asamblea General número 51 de ODEPA, la Organización Deportiva Panamericana, reunida en Toronto, Canadá.
Lima recibió 31 votos contra 9 para Santiago y La Punta y 8 para Ciudad Bolívar, haciendo innecesaria una segunda vuelta de escrutinios.
La capital peruana ya había sido candidata para los Juegos del 2015, que tendrán lugar en Toronto, pero quedó segunda en la votación con 15 votos frente a los 42 que recibió Toronto. Lima nunca ha sido anfitriona de los Juegos.
Se proyecta que la ciudad tendrá una población en su área metropolitana de unos 12 millones de habitantes para el año 2019 y el plan que presentó su candidatura contempla el desarrollo de las instalaciones deportivas alrededor de dos núcleos compactos haciéndole honor al lema de la candidatura “Unos Juegos, una Ciudad”.
Santiago ha ganado los derechos a ser sede para el evento panamericano en dos ocasiones, en 1975 y en 1987, habiendo renunciado a la sede en ambas ocasiones después de haber pasado por el proceso. Esos hechos parece que dejaron un mal sabor en el paladar de los votantes panamericanos.
Lima recibió 31 votos contra 9 para Santiago y La Punta y 8 para Ciudad Bolívar, haciendo innecesaria una segunda vuelta de escrutinios.
La capital peruana ya había sido candidata para los Juegos del 2015, que tendrán lugar en Toronto, pero quedó segunda en la votación con 15 votos frente a los 42 que recibió Toronto. Lima nunca ha sido anfitriona de los Juegos.
Se proyecta que la ciudad tendrá una población en su área metropolitana de unos 12 millones de habitantes para el año 2019 y el plan que presentó su candidatura contempla el desarrollo de las instalaciones deportivas alrededor de dos núcleos compactos haciéndole honor al lema de la candidatura “Unos Juegos, una Ciudad”.
Santiago ha ganado los derechos a ser sede para el evento panamericano en dos ocasiones, en 1975 y en 1987, habiendo renunciado a la sede en ambas ocasiones después de haber pasado por el proceso. Esos hechos parece que dejaron un mal sabor en el paladar de los votantes panamericanos.