El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas debería imponer de inmediato un embargo de armas global a Birmania (Myanmar), dijo Human Rights Watch y más de 200 organizaciones no gubernamentales de todo el mundo en un llamamiento público.
El Consejo de Seguridad debe actuar rápidamente para presionar a la junta para que deje de violar los derechos humanos de las personas que protestan por el golpe de estado y el régimen militar del 1 de febrero de 2021, indica el comunicado.
“El hecho de que el Consejo de Seguridad de la ONU no haya discutido siquiera un embargo de armas contra la junta es una abdicación espantosa de sus responsabilidades para con el pueblo de Myanmar”, dijo Louis Charbonneau, director de asuntos de la ONU en Human Rights Watch. "Las declaraciones ocasionales de preocupación del consejo ante la violenta represión de manifestantes en gran parte pacíficos por parte de los militares son el equivalente diplomático de encogerse de hombros y marcharse".
Los grupos dijeron que el Reino Unido, el redactor designado por el Consejo de los textos sobre Myanmar, debería iniciar inmediatamente negociaciones en el Consejo de Seguridad sobre un proyecto de resolución que autorice un embargo de armas.
"Ningún gobierno debería vender una sola bala a la junta en estas circunstancias", dijeron los grupos en su llamamiento.