La contratación de casi un centenar de médicos cubanos para trabajar en diferentes hospitales públicos de Honduras ha generado polémica entre los representantes del gremio de profesionales sanitarios en ese país.
Esta semana, la Secretaría de Salud (SESAL) de Honduras confirmó que en enero de 2024 llegarán 88 médicos graduados de diferentes especialidades que no tienen cubiertas. De acuerdo con declaraciones del ministro del sector, José Manuel Matheu, al diario local El Heraldo, el salario no saldría del presupuesto de esa entidad, pues el trato era con el Gobierno de Xiomara Castro, aliada del régimen de La Habana.
“Nosotros, como Secretaría, no tenemos ninguna erogación, ningún pago de algún médico. Este es un convenio entre dos gobiernos. Entiendo yo que, si hay alguna retribución económica, lo hará directamente el gobierno de la república”, aseguró el funcionario, y aclaró que su ministerio solo se encargará de ubicarlos en los diferentes hospitales.
“Estos no van a centros de salud, sino en lugares donde se ocupan especialistas”, comentó.
Las declaraciones del ministro a la prensa responden a los cuestionamientos hechos por la presidenta del Colegio Médico de Honduras (CMH), Helga Codina, que aseguró el pasado fin de semana que la SESAL estaba contratando médicos cubanos en lugar de profesionales hondureños.
“Nos oponemos frontalmente a estas decisiones políticas, que solo se toman para ayudar a otro país. Si quieren ayudar, al que tienen que ayudar es a su país, a sus médicos, porque si bien es cierto que al médico cubano le pagan una cantidad mínima, al Gobierno de Cuba, por cada cubano que trae, le pagan una gran cantidad, y con eso se pueden pagar dos y hasta tres médicos hondureños”, dijo Codina, y explicó que de los 20,250 profesionales inscritos en el CMH, unos 11,000 están desempleados.
Helga advirtió que con esta nueva contratación se están violando las leyes. “Todo profesional de la medicina que quiera ejercer en nuestro país tiene que ser evaluado y certificado por el CMH, porque es el ente que, por ley, regula la profesión. Han venido cubanos al país y no ha sido notificado el Colegio Médico”.
“Estos cubanos, no sabemos si realmente son médicos, no sabemos quién avala su profesión. Muchos andan dando consultas y no sabemos ni siquiera su especialidad, y hemos detectado en algunas ocasiones problemas de mal manejo. Este es un riesgo que se corre por andar trayendo extranjeros sin pasar por la debidas normas y leyes del país", aseguró.
El ministro se defendió ante esas acusaciones diciendo que ellos no aceptarían profesionales que no tuvieran las calificaciones y acreditaciones de sus respectivos países. “A mí me llama la atención que un montón de médicos hondureños se están yendo a Cuba a especializar, algunos creo que son familiares de miembros del CMH, entonces cómo van a poner en duda que vengan especialistas de Cuba al país, si es donde se van a especializar sus hijos”, dijo.
José Manuel Matheu no hizo referencia a la cantidad de dinero que el gobierno le pagaría a los doctores, pero Codina recordó que, anteriormente, el salario que le entregaban al régimen era de unos mil dólares por cada médico, y entre 350 y 400 a los profesionales.
“Eran brigadas de seis años y muchos se quedaron y están aquí ahora, haciéndole competencia al médico hondureño", criticó.
Ya la Secretaría de Salud se había pronunciado en su perfil en la red social X, tras las declaraciones de la presidenta de CMH, asegurando que "en ningún momento se han realizado contratos con médicos cubanos, sino que es parte de un convenio de apoyo entre ambos gobiernos".
"Mediante este convenio vendrán 88 médicos especialistas que no existen en el país para apoyar en áreas donde se carece por el momento de recursos especializados. Lamentamos que se pretenda confundir entre las necesidades de médicos especialistas y la oferta de médicos generales, así como lamentamos que especialistas que tienen dos o más plazas no dejen al menos, temporalmente, una de esas plazas, para que la ocupen otros de sus mismos colegas", dijeron.
En agosto del año pasado hubo otra polémica entre el gremio de profesionales de la salud en Honduras porque el gobierno estaría pagando unos 2,000 dólares por cada uno de los médicos que habían llegado al país un mes antes. En esa ocasión, no trascendió la cantidad de sanitarios de la isla que fueron contratados.
Organizaciones defensoras de derechos humanos han advertido que la contratación de médicos cubanos en el exterior constituyen formas de "trabajo forzoso" y "esclavitud moderna".
La mayoría de los que son enviados a misiones en el exterior son ubicados en zonas con altos índices de violencia y sometidos a duras condiciones de trabajo, pobreza y limitación de libertades. El régimen, que se queda con al menos el 75% de lo que pagan los países por los galenos, reconoció en 2021 que las exportaciones de servicios de salud representaron el 50% de las exportaciones de servicios en todo 2020.
"El Gobierno de Cuba continúa utilizando medidas coercitivas para beneficiarse de la explotación y el trabajo forzoso de sus trabajadores internacionales, incluidos los profesionales médicos", denunció en julio pasado el subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental, Brian A. Nichols.
"Instamos a las autoridades cubanas a cumplir con las obligaciones internacionales de derechos humanos y las normas laborales. #EndHumanTrafficking", añadió en un mensaje compartido por la embajada de Estados Unidos en La Habana en ese momento.