La historia de un adolescente cubano que vive en una precaria vivienda en Centro Habana ha tocado la sensibilidad de los usuarios de las redes sociales, y los ha movido a sumarse a una campaña de recaudación de fondos para comprarle una casa.
Abraham Borcurt vive con su madre y hermano mayor en una habitación minúscula, en el barrio de Colón. En sus 16 años de vida nunca ha disfrutado de servicio sanitario en su casa y, con solo el salario de su madre, han pasado todo tipo de necesidades. Este curso decidió abandonar el preuniversitario para comenzar a trabajar y sostener a la familia.
"Yo tengo muchos amigos y no les enseño dónde vivo, porque tengo pena de traerlos aquí. Me siento un poco extraído de lo de otra gente, porque nadie vive así", confesó en el video que comparten los usuarios en muro tras muro de Facebook.
La historia de este joven y su familia saltó al ciberespacio después que la publicación cubana independiente Cubanet publicara un video mostrando la precaria vivienda y al propio Abraham contando su historia.
No es la primera vez que Serafín Morán, quien sacó a la luz la historia, se encuentra con una situación de extrema pobreza en Cuba, pero sí la primera que presencia semejante reacción. "Nunca me llegué a imaginar que esto podía repercutir tanto", comentó en el programa Contacto Cuba de Radio Martí.
La campaña en la plataforma de financiamiento Go Fund Me la comenzaron el joven fotógrafo Enrique Ricabal y su amigo Frank Falcón, ambos habaneros residentes en Estados Unidos, tras ver un reportaje del periodista Mario Vallejo, de la cadena Univisión.
"Abraham es esa Cuba que muchos no conocen pero que existe. Nos llamó mucho la atención su forma de expresarse y su amor a su familia. ¡Ayúdanos a mejorar la situación de vivienda de Abraham! ¡Entre todos habremos asegurado que los sueños de este adolescente no mueran a sus 16!", escribió Ricabal en su petición de ayuda.
Las donaciones van desde $5 hasta cientos. Todos contribuyen con lo que pueden. Desde el inicio de la campaña, el empresario de las telecomunicaciones Yamel Barroso prometió como incentivo doblar la cifra una vez que se recaudaran los primeros $6.000, y lo cumplió.
"Yo soy igual. Soy de un pueblecito de campo. Yo no estudié nada y a veces la esencia no está en estudiar, la esencia está en saber aplicar el conocimiento", dijo Barroso a Martí Noticias y aprovechó para recordar su consejo a Abraham: "Tienes que luchar. Tienes que perseguir los sueños".
Muchos de los donantes, como Massiel Župova, ven en Abraham a sus propios hijos. "Cada vez que oigo hablar a ese niño/hombre Abraham se me conmueve el corazón y me parece escuchar a mi propio hijo, que tiene más o menos su edad. Conmovida también por este inmenso exilio que jamás abandona a sus hermanos", escribió Župova en Go Fund Me.
Hasta el momento de la publicación de esta nota, 368 personas habían donado cerca de $16.000 en dos días. La meta es recaudar $20.000 y al paso en que nuevos donantes se suman habrán llegado a esa cifra en breve.
La mayoría de los donantes acompañan su contribución con palabras de ánimo y consejos, y se agradecen unos a otros como si fuesen ellos mismos este jovencito cubano, talvez de ahí el nombre de la campaña: Todos Somos Abraham.
"Porque juntos somos una fuerza incalculable, porque todos somos esa familia cubana, aquí va otro granito de arena", escribió Giselle Martínez antes de hacer su donación.
Muchos expresan sus deseos de ver el final feliz de esta historia: "¡¡¡Va subiendo, va subiendo!!! Ansiosa por ver la carita de los 3 cuando tengan su casita!", dice Yanet Trujillo, una de las donantes.
La madre de Abraham, María Angelina, cuando los periodistas de Cubanet le dieron la noticia de la recaudación, comenzó también a soñar con el nuevo hogar: "Espero algún día conocerlos, que puedan venir a mi nueva casa, para lo que tenga brindarles a ustedes, porque yo sé que a través de eso van a venir nuevas cosas y la casa va a estar siempre llena de gente".