Un grupo de congresistas demócratas emitió un comunicado en el que aplauden la decisión del presidente Joe Biden de eliminar a Cuba del registro de Países que No Cooperan Plenamente con los Esfuerzos Antiterroristas de Estados Unidos y critican la anterior inclusión del régimen de La Habana en la lista negra de Washington.
Jim McGovern, miembro de mayor rango del Comité de Reglas de la Cámara de Representantes; Barbara Lee, miembro de mayor rango del Subcomité de Asignaciones Estatales y Operaciones Extranjeras; Gregory W. Meeks, miembro de alto rango del Comité de Asuntos Exteriores, y Joaquín Castro, miembro de alto rango del Subcomité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes para el Hemisferio Occidental, expresaron que daban la bienvenida a la decisión de la Administración Biden porque la “designación previa fue contraproducente e inútil”.
Los representantes demócratas señalaron que “el gobierno de Estados Unidos ha estado hablando directamente con el gobierno cubano sobre esfuerzos policiales y antiterroristas, incluidos los relacionados con la extradición” y que “si bien Estados Unidos tiene muchos problemas con el Gobierno de Cuba, la mejor manera de abordarlos es mediante el compromiso y el diálogo, como lo hacemos con otros países de nuestro hemisferio”.
Añadieron que esperan seguir trabajando con la administración Biden para “promover políticas diseñadas para ayudar al pueblo de Cuba a reclamar todos sus derechos humanos y construir una sociedad próspera e inclusiva”.
Al anunciarse la semana pasada la decisión de sacar a Cuba de la lista de Países que No Cooperan Plenamente con los Esfuerzos Antiterroristas, un grupo de congresistas republicanos la calificó como "un fracaso del gobierno de Joe Biden".
El congresista Mario Díaz-Balart opinó que la administración Biden cometió “un error en su política exterior” que socava los intereses de seguridad nacional de Estados Unidos.
"La débil explicación para negarse a designar al estado terrorista anti-americano de Cuba como un 'país no completamente cooperador' es tan errónea como el resto de su enfoque en política exterior", dijo Díaz-Balart.
Por su parte, el congresista Carlos A. Giménez, instó “al presidente y a su equipo a que abandonen esta mala política de concesiones y traten a Cuba comunista como el régimen paria internacional que es”.
"Una vez más, la Casa Blanca peca de inocente o es bastante evidente su condescendencia con el régimen de Castro/Díaz-Canel”, agregó la congresista María Elvira Salazar.
Mientras tanto, el senador Marco Rubio recordó que "el régimen criminal e ilegítimo de La Habana apoya organizaciones terroristas extranjeras en Colombia y alberga a terroristas de ETA al igual que a fugitivos buscados por tribunales en Estados Unidos”.
“Cada vez que el presidente Biden apacigua al ilegítimo régimen comunista cubano, desestabiliza el hemisferio occidental, apoya el terrorismo y hace un gran favor a los enemigos de Estados Unidos en Rusia, Irán y la China", señaló el senador Rick Scott.
Para Scott, "Biden es demasiado débil y está demasiado comprometido a mantener nuestras fronteras abiertas para obtener el mismo resultado. Lucharé contra viento y marea para revertir esta decisión".