Rusia informa que Navalny, el crítico más acérrimo de Putin, murió en prisión

El líder de la oposición rusa Alexei Navalny es visto en una pantalla a través de un enlace de vídeo desde la colonia penal correctiva IK-2 en Pokrov, el 17 de mayo de 2022. REUTERS/Evgenia Novozhenina

El opositor ruso Alexei Navalny, el más frontal opositor de Vladimir Putin, murió en prisión, según informó un comunicado del departamento local del Servicio Penitenciario Federal de la región de Yamalo-Nenets, donde el crítico del Kremlin, de 47 años, cumplía su condena.

"El 16 de febrero de 2024, en la colonia penitenciaria número 3, el recluso Aleksei Navalny se sintió mal después de un paseo y casi inmediatamente perdió el conocimiento. Inmediatamente llegó el personal médico de la institución y llamaron a una ambulancia", se lee en un comunicado.

El presidente Vladimir Putin ya fue informado sobre la muerte del preso de conciencia reconocido por Amnistía Internacional, según afirmó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.

Las autoridades rusas informaron que han iniciado una investigación procesal sobre la muerte del Premio Sájarov a la Libertad de Conciencia 2021, que permanecía recluido en la colonia penal en el Ártico.

Leonid Volkov, cercano colaborador de Navalny alertó en redes sociales que no podía confirmar la muerte y agregó que el abogado del opositor estaba en camino a la cárcel donde supuestamente murió.

El comunicado de las autoridades penitenciarias asegura que "se llevaron a cabo todas las medidas de reanimación necesarias, que no dieron resultados positivos. Los médicos de la ambulancia declararon muerto al preso. Se están determinando las causas de la muerte".

Navalny fue detenido el 17 de enero de 2021 en un aeropuerto de Moscú al llegar de Alemania, donde había sido tratado por el envenenamiento con un agente nervioso tipo Novichok en 2020, presuntamente ordenado por Putin.

Luego fue condenado a dos años y medio de prisión por violar las condiciones de una libertad condicional anterior durante su convalecencia en el extranjero. El Kremlin ha negado cualquier implicación en el envenenamiento de Navalny.

Navalny se había quejado de acoso y malos tratos desde su encarcelamiento, incluida la privación del sueño, repetidas temporadas en celdas de castigo por presuntas infracciones menores y falta de atención médica.