El segundo debate de los precandidatos demócratas a la presidencia de Estados Unidos tuvo lugar la noche del jueves en el Centro de Artes Escénicas Adrienne Arsht, de Miami, organizado por NBC News, MSNBC y Telemundo.
Participaron el hasta ahora favorito en los sondeos, el ex vicepresidente Joe Biden, y Michael Bennet, Pete Buttigieg, Kirsten Gillibrand, Kamala Harris, John Hickenlooper, Bernie Sanders, Eric Swalwell, Marianne Williamson y Andrew Yang.
El primer segmento estuvo dedicado mayormente a la salud pública. Los moderadores hicieron preguntas directas a los precandidatos que, como Sanders, quieren establecer un sistema de Medicare para todos, y como Buttigieg, que no quiere sacar del juego a las aseguradoras privadas.
Dos veces le preguntaron a Sanders de dónde saldrían los fondos para un seguro universal de salud en Estados Unidos, pero el Senador evitó entrar en detalles haciendo referencias generales a los derechos de los estadounidenses y a lo que han logrado países como Canadá.
Biden, que centra su plan en el perfeccionamiento de Obamacare, declaró que hay que llevar a la cárcel a los ejecutivos de las grandes compañías fabricantes de medicamentos que han mentido, como en el caso de los opiáceos.
Respondiendo una pregunta sobre socialismo, Hickenlooper dijo, refiriéndose a todos los precandidatos: “Si no definimos claramente que no somos socialistas nos van a definir como socialistas y vamos a perder”.
China está usando la tecnología para perfeccionar su dictadura, comentó Buttigieg cuando en el segundo segmento del debate abordaron el tema.
Hubo un intenso intercambio entre la Senadora Harris y Biden, quien ha sido cuestionado por defender su trabajo con senadores acusados de ser segregacionistas. Biden defendió su carrera, primero como abogado de oficio y luego mientras estuvo en la Casa Blanca con Barack Obama. El ex vicepresidente fue el que más habló, según el conteo de FiveThirtyEight.com, con Harris en segundo lugar, seguida por Buttigieg.
Cuba, Venezuela y Nicaragua volvieron a estar ausentes, igual que la noche del miércoles, cuando debatieron otros 10 precandidatos demócratas.
Sin embargo, muchos de los 20 contendientes han expresado su apoyo a una apertura de relaciones bilaterales con La Habana, así como la suspensión del embargo comercial impuesto al gobierno cubano.
Algunos de los precandidatos respondieron directamente o por medio de sus oficinas de prensa a la pregunta del diario Tampa Bay News si apoyaban o rechazaban el embargo, y así respondieron:
Michael Bennet, senador de Colorado: Yo he apoyado poner fin al embargo a Cuba.
Pete Buttigieg, alcalde de South Bend, Indiana: La política hacia Cuba debe ser de acercamiento.
Kirsten Gillibrand, senadora de Nueva York: Yo pondría fin al embargo para tener la oportunidad de influir al gobierno de Cuba.
Kamala Harris, senadora de California: Hay que poner fin al fracasado embargo.
John Hickenlooper, ex gobernador de Colorado: Tenemos diferencias claras con el gobierno cubano.
Bernie Sanders, senador de Vermont: Siendo presidente, levantaría el embargo.
Eric Swalwell, legislador de California: Levantar el embargo a Cuba. El presidente Obama estaba en el sendero correcto.
Marianne Williamson, autora: Yo pondría fin al embargo a Cuba.
Andrew Yang, empresario: Debemos poner fin al embargo para poder influir de forma más directa sobre Cuba.
Sanders, por más
Entre todos el más conocido por sus opiniones sobre Cuba, e incluso, el exdictador Fidel Castro, es Bernie Sanders.
El actual precandidato a la Casa Blanca por el Partido Demócrata viajó a Cuba junto a su esposa en 1989. Era alcalde de Burlington, una pequeña ciudad del estado de Vermont. Su visita duró ocho días, en una época en la que esos viajes no eran comunes.
El objetivo de la visita era conocer a Fidel Castro, según un artículo publicado por el diario The Miami Herald.
La visita al dictador no pudo ser y las autoridades cubanas redujeron las pretensiones del político estadounidense a un encuentro con el entonces presidente de la Asamblea Provincial del Poder Popular de La Habana.
Lee también El viaje de Sanders a Cuba y el encuentro con Fidel Castro que nunca ocurrióSanders aseguró que “la revolución cubana era más profunda de lo que había pensado”, según indica el diario miamense.
La visión que tuvo de la sociedad cubana fue que “las personas, en lugar de trabajar por su propia riqueza personal, realizan el trabajo para el bien común”.
Hickenlooper: Noticias desde La Habana
En una vista a la capital cubana en febrero de 2017, el entonces gobernador de Colorado John Hickenlooper dijo ante la prensa internacional que altos funcionarios de la Cancillería cubana estaban “cautelosamente optimistas” sobre el futuro de las relaciones con Estados Unidos, en referencia a la asunción de Donald Trump al poder en Estados Unidos.
Lee también Gobierno cubano desea trabajar con Trump, asegura Gobernador de Colorado“Parecían ansiosos por tener la oportunidad de construir una relación con el presidente Trump y hacer que sea constructiva”, dijo Hickenlooper tras reunirse con Josefina Vidal, entonces directora general Departamento de América del Norte en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba.
Sobre la visita oficial subrayó que “la gente más joven parece ansiosa por construir una relación con Estados Unidos”. Y que tras visitar cinco paladares, sintió mucho optimismo y energía positiva.
[Con información de Tampa Bay News, Radio Televisión Martí y Redes Sociales]