Cuatro senadores demócratas criticaron las políticas migratorias de la Administración de Donald Trump y pidieron que migrantes de Cuba, Venezuela y Nicaragua tengan la posibilidad de pedir asilo político en Estados Unidos.
En una carta dirigida al Secretario de Estado, Mike Pompeo, y al Secretario Interino de Seguridad Nacional, Chad F. Wolf, los demócratas alertan que las políticas implementadas por la actual Administración "envían un mensaje de insensibilidad, crueldad y desprecio por los derechos humanos que alimenta la agenda de nuestros adversarios para poner en duda el papel excepcional de Estados Unidos como un faro de libertad y democracia”.
La misiva fue firmada el lunes por el legislador cubanoamericano Bob Menéndez (demócrata por New Jersey), Dick Durbin (Illinois), Patrick Leahy (Vermont) y Ben Cardin ( Maryland).
La carta indica que con los nuevos protocolos migratorios venezolanos, cubanos, nicaragüenses y otros han sido regresados "a los perseguidores y torturadores de los que huyeron”.
“Le instamos a que ponga fin a estas políticas de inmediato y defienda el derecho a buscar asilo en los Estados Unidos”.
El documento destaca que en lo que va de año fiscal 2020 han sido expulsados cerca de 147 000 solicitantes de asilo, han sido deportados 1300 cubanos, 100 venezolanos y 1000 nicaragüenses y añade que durante la mitad del año pasado 7 300 cubanos fueron devueltos a México.
Además menciona que profesionales de la salud cubanos trabajan como asistentes en el campamento para refugiados en Matamoros, México, luego de huir de sus misiones en Venezuela, víctimas del tráfico humano.
Lee también Médico cubano en la frontera: "El gobierno nos ha tenido esclavizados toda una vida" (VIDEO)Los Protocolos de Protección de Migrantes (Migrant Protection Protocols, MPP) más conocidos como programa de “Permanencia en México” fueron implementado en enero de 2019 para frenar la migración irregular hacia EEUU y aliviar el hacinamiento en los Centros de Detención de Migrantes en la zona fronteriza.
Este acuerdo bilateral firmado entre EEUU y México dispone que tanto quienes se presentan en los puertos de entrada de la frontera como quienes sean capturados cruzando de manera ilegal sean devueltos a México en espera de una citación para presentar su caso ante una corte de inmigración.