Solidaridad Cristiana Mundial denunció la demolición de dos templos y el arresto de al menos tres líderes religiosos en Cuba el 8 de enero, según un comunicado de su presidente ejecutivo, Mervyn Thomas, en el sitio digital de la organización.
Las iglesias pertenecían al Movimiento Apostólico, una red de iglesias no registradas oficialmente, explica Solidaridad Cristiana.
Los oficiales del Gobierno demolieron los templos de los reverendos Bernardo de Quesada Salomón, en Versalles, Camagüey, y Juan Carlos Velázquez, en Victoria de Las Tunas, sin aviso previo.
A las 4:00 a.m. las autoridades se llevaron esposados a De Quesada y a su esposa, Damaris, y les tuvieron retenidos mientras se demolía su templo. Además, esposaron a su hijo (de 19 años) y le mantuvieron retenido en la casa, hasta que echaron abajo la edificación.
Damaris fue liberada cerca de la 1:00 p.m. y, dos horas después, el reverendo.
Las fuerzas de la Seguridad del Estado también bloquearon los caminos y la casa del pastor y activista por la libertad religiosa,
Mario Félix Lleonart, en un intento infructuoso de arrestarle, pero sí lograron detener a otras personas vinculadas a este templo, quienes pretendían ir al sitio de la demolición, apunta la organización.
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En su reporte también explican que numerosos pastores y fieles reportaron la interrupción del servicio telefónico, así como la presencia policial en las principales carreteras de Camagüey.
"La escala de la operación del Gobierno, junto con las detenciones masivas y el bloqueo de la comunicación podría ser una reacción a su esfuerzo abortado por demoler una iglesia de la Asamblea de Dios, en Santiago, en noviembre, después de cristianos locales celebran una sentada pacífica en el edificio de la iglesia", dice Thomas.
Los templos demolidos estaban localizados en terrenos privados de los pastores, quienes habían recibido los permisos de construcción o remodelación de las autoridades.
En el caso de Núñez Velázquez, inicialmente recibió el permiso el 5 de julio de 2015, sólo para serle revocado un mes después por el Ministro de Vivienda y la iglesia designada para demolición, explica el informe.