Este martes el Tribunal Municipal de Alquízar, en la provincia de Artemisa, desestimó los cargos en contra de Diasniurka Salcedo Verdecia y su esposo Jorge Hernández Ramos, en un juicio que amenazaba con quitarle al matrimonio de opositores la custodia de sus cinco hijos adoptados.
Ambos fueron acusados por la fiscalía de ejercer mala influencia sobre los menores, en un proceso que tuvo lugar bajo las presiones de la Seguridad del Estado, según lo informó la periodista independiente en entrevista con Martí Noticias.
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“Yo he hecho un trabajo social durante mucho tiempo, yo he traído varios niños que han sido vulnerados, maltratados a vivir conmigo, siempre el régimen ha estado amenazando con ellos, y en el día de ayer me hicieron un juicio para intentar quitarme los niños, retirarme la custodia de ellos, pero no sucedió debido a que allí fueron mis vecinos en apoyo a testificar a mi favor, 12 personas. Allí acudió la trabajadora social. Ella, mes tras mes, me hace visita, porque cada vez que ellos entran por esa puerta para acá, para supervisar, saben que los niños solos hablan y le demuestran a ellos cómo se sienten aquí", declaró Salcedo Verdecia.
Los acusadores, según dijo la periodista independiente, "cometieron la osadía, de traer a la madre de dos de los niños de la propia prisión y ella testificó también a mi favor, como ella dijo, a pesar de todo lo que pudiera suceder, esa mujer estando en prisión le han hablado horrores de mí y estaba bajo presión".
La madre biológica de los dos niños está cumpliendo 14 años de condena por abuso infantil, tras una denuncia que realizó hace cuatro años Salcedo Verdecia, alertando sobre los maltratos en esa familia de Corralillo, en el municipio de Bauta.
Esa información fue utilizada por la policía, que hasta ese momento nada había hecho, para arrestar a la mujer. Luego las autoridades querían llevar al niño para una casa de amparo, y la activista localizó al padre de la víctima, quien le dijo que no tenía recursos para atender al menor, ni a su hermano. A partir de ese momento, Salcedo Verdecia trajo para su casa al niño y luego a su hermano mayor, ambos tienen 4 y 5 años de edad respectivamente.
La opositora dijo que las autoridades no esperaban que fueran tantas personas a apoyarla en el juicio, que duró apenas 20 minutos.
"Estaban atemorizados. Ellos lo que trataron era de terminar rápido lo que ellos mismos comenzaron", apuntó la activista, agregando que la Presidenta del Tribunal falló a su favor porque realmente le había quedado demostrado que ella es buena madre.
Según la activista, este proceso es parte del acoso que se ha incrementado sobre ella desde el 24 de noviembre, cuando se plantó junto a un grupo de madres frente al Ministerio de Salud Pública en La Habana, para exigir atención médica a los niños y denunciar la crisis del sistema sanitario en la isla.
En declaraciones a Martí Noticias, la activista denunció que la represión ha ido en aumento. "Los propios oficiales de la Seguridad del Estado me han estado advirtiendo sobre eso, que puedo ir a prisión, que piense que ellos no son mis hijos biológicos, que me los pueden retirar, han estado haciéndome de todo, ellos nunca van a parar y yo menos”.